Abril registra el menor número de muertos desde septiembre
● Es, por contra, el cuarto con más casos de contagios de la pandemia
Granada acaba de vivir uno de los peores meses de la pandemia de coronavirus. En concreto el cuarto más malo en cuanto a casos notificados, el tercero con mayor número de ingresos hospitalarios, y el peor en pacientes que han requerido entrada en UCI. Y sin embargo, la movilidad se abre, los bares abren más tiempo, y los comercios hacen jornada normal, aunque con aforos limitado. Esto es porque hay otros tres indicadores que son todo lo contrario a los anteriores: ha sido el mejor mes de la campaña de vacunación, el segundo mejor mes en cuanto a pacientes recuperados, y el primer mes con menos de cien muertos registrados desde septiembre del año pasado. Y estos son los indicadores que han hecho Granada y Andalucía se abran pese a que la incidencia sigue siendo muy alta.
Son las contradicciones principales de un mes que ha cambiado el paradigma del coronavirus, tal y como se estaba comportando hasta ahora. Los contagios siguen existiendo y de forma muy importante, pero la incidencia se ha quedado estancada. Los hospitales están teniendo mucho movimiento de entradas de pacientes aunque la ocupación no ha crecido, incluso está decreciendo, y el promedio de camas ocupadas está lejos de las peores ocasiones. Pero sobre todo las muertes han ido en remisión, y en todo esto ha jugado un papel crucial el comienzo y extensión de la campaña de las vacunas frente al virus. Inmunizar a los colectivos de edad y de población más vulnerables ha sido clave para que, aunque hay mucha transmisión local del virus, este mes haya evitado que los fallecimientos hayan ido en consonancia a los contagios.
De esta forma, abril se cerró con 8.935 contagios por coronavirus notificados al Ministerio de Sanidad, que han implicado la hospitalización de 823 personas, y de las que 158, el 19,1%, han necesitado entrar en las Unidades de Cuidados Intensivos. Sin embargo, el promedio de personas ingresadas durante este mes pasado ha sido de 154 (aunque el pico haya estado en 378), 87 muertos y 9.450 personas curadas o recuperadas.
Por comparar con un mes similar en número de contagios, el más próximo fue febrero con 6.552 positivos por Covid-19, 964 hospitalizados (128 UCI), una media de 139,5 ingresados, 243 muertos y 5.401 recuperados. Es decir, que incluso habiendo menos contagios notificados, el número de hospitalizados fue mayor que en abril, al igual que sucede sobre todo con los fallecidos.
El descenso del número de muertos es el que motiva principalmente estar en una situación tan nueva de la pandemia, no solo en Granada, sino en toda la comunidad andaluza, y tener muchas más libertades que hace un año a pesar de que las tasas de incidencia sean 21 veces superiores. Abril ha sido el primer mes con menos de un centenar de decesos por Covid-19 en la provincia desde el mes de septiembre del año pasado. Son 87 fallecidos por la enfermedad frente a los 42 de aquel mes. Desde octubre las cifras han estado por encima del centenar siempre, con picos de 379 y 243 en noviembre y en febrero. Por entonces las muertes supusieron el 1,24% de los contagios mientras que en este último mes han significado solo un 0,97%. Ya en marzo se notó levemente con 129 decesos, la mejor cifra desde octubre entonces.
Es imposible desvincular este buen dato de los efectos de la vacunación, la cual evita la enfermedad grave y sobre todo la muerte por el coronavirus. La previsión además es que este parámetro vaya mejorando en los próximos meses, de ahí a que la Junta haya decidido que haya una vida casi normal a pesar de los contagios. Y es que las vacunas suelen tardar unas dos semanas en empezar a crear inmunidad, por lo que la aceleración del proceso que se ha empezado a notar en las dos últimas semanas, no tendrá efectos hasta mayo.
Además, el descenso de óbitos por el virus se ha producido habiéndose puesto la mitad de las vacunas que en el mes de abril. En el último mes se inocularon en Granada 165.239, mientras que los combinados desde que empezó la campaña en diciembre hasta marzo fueron 180.431, una diferencia de 15.000 en solo un mes. Si ya con menos dosis puestas han caído las muertes, de mantenerse y aumentarse las vacunaciones como se espera en mayo, el futuro próximo parece muy alentador.
Queda terminar con el virus, bajar las tasas de incidencia y que las vacunaciones también se noten en el desarrollo de la enfermedad grave, que de momento está afectando a grupos mayormente aún no inmunizados. Pero esto se parece bastante al principio del final. Así sea.
El aumento de las vacunaciones ha sido clave para relajar medidas pese a las tasas