Europa confirma la compra 1.800 millones de vacunas a Pfizer
Los líderes comunitarios presionan a EEUU y el Reino Unido para que se abran a exportar antes que a liberar las patentes
La Comisión Europea ha aprobado el contrato por 1.800 millones de dosis de la vacuna de Pfizer y BioNTech, según informó ayer la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen. El contrato contempla 900 millones de dosis garantizadas, así como 900 millones “opcionales” para su distribución entre 2021 y 2023, anunció Von der Leyen en su cuenta oficial en Twitter.
“Seguirán otros contratos y otras tecnologías de vacunas”, añadió la dirigente alemana, sin más precisiones. Este acuerdo supone la conclusión de las conversaciones que Von der Leyen anunció a mediados del mes pasado para conseguir inyecciones de refuerzo contra o vacunas de segunda generación para combatir las mutaciones del virus. El objetivo de ese contrato, después de que Von der Leyen insistiera en abril en que la Comisión ha aprendido las “lecciones” del primer año de pandemia, es que los fármacos sirvan para “reforzar y prolongar la inmunidad” y prepararse ante la posibilidad de que puedan aparecer nuevas variantes del virus.
Con la vacunación “progresando a buen ritmo”, Europa tiene que prepararse para la “siguiente etapa”, dijo Von der Leyen este sábado en un segundo tuit. Eso incluye, precisó, las vacunas de refuerzo y el tratamiento de “posibles variantes” del Covid, pero también “la vacunación de niños y adolescentes”. Con este contrato, la UE pone de manifiesto su confianza y apuesta por las vacunas de tecnología de ARNm, que también utiliza el laboratorio Moderna, que junto con Astrazeneca y Janssen son las cuatro aprobadas por ahora en la UE por la Agencia Europea de Medicamentos.
Esta prometedora tecnología subyace en el debate abierto en el mundo por la petición de la India y Sudáfrica de liberar las patentes de las vacunas contra el Covid-19, y que ahora apoya EEUU, mientras que la UE se ha mostrado “abierta” a estudiar esa petición pero los Veintisiente aún no han cerrado una postura común.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, aseguró ayer que liberalizar las patentes de las vacunas contra el coronavirus no es una “solución mágica” para aumentar la producción a corto plazo e instó a otros países y regiones a permitir la exportación, como hace el club comunitario. Michel anunció que los Veintisiete trataran este asunto en la cumbre del 25 de mayo “para garantizar que podemos alentar todos los esfuerzos para encontrar un acuerdo común sobre este importante tema”.
Los líderes de Italia, España, Alemania y Francia se posicionaron ayer en este debate y de forma alineada. El presidente del Gobierno transalpino, Mario Draghi, afirmó ayer que, antes de afrontar la posible liberación de las patentes, Estados Unidos y el Reino Unido deben “retirar el bloqueo a las exportaciones” en vacunas y componentes. “La Unión Europea exporta la mitad de las vacunas que ha proporcionado a sus ciudadanos. El 50% de su producción la ha dado a otros mercados”, destacó ayer el ex jefe del BCE en una rueda de prensa al final de la cumbre social de líderes europeos en Oporto.
El presidente francés, Emmanuel Macron, también que señaló directamente a Washington para que “ponga fin a las prohibiciones a la exportación, no solo de vacunas, sino de componentes de estas vacunas, que impiden la producción”, recalcó el galo en rueda de prensa. Aunque durante la semana se había mostrado abierto a liberalizar las patentes, en Oporto matizó que ésta debe ser la cuarta prioridad. Antes, además de que otros bloques empiecen a exportar, es necesario aumentar la producción y las donaciones.