Granada Hoy

Osasuna frena al Athletic en pos de Europa

● Un gol de Budimir, con los rojillos ya salvados, castigó a los bilbaínos

- Ramón Orosa (Efe) BILBAO

Osasuna celebró su permanenci­a matemática en LaLiga Santander con un gol a última hora del croata Ante Budimir que le sirvió para empatar a dos tantos en San Mamés ante un Athletic que con este séptimo empate en nueve partidos sin perder dice adiós a las escasas posibilida­des de lograr billete europeo.

Se adelantó por dos veces el conjunto bilbaíno con tantos de los jóvenes Morcillo, a los 56 segundos de partidos, y Sancet, pasada la hora de encuentro, pero empató el equipo navarro con tantos de los balcánicos Brasanac, en el minuto 11, y Budimir, en el 88.

Fue demasiado castigo para el Athletic y el buen partido de sus jóvenes promesas ofensivas, los goleadores y también un Villalibre que posiblemen­te fuese el mejor del partido junto a Berenguer. Pero también supuso un premio merecido a la capacidad de reacción de un Osasuna tras ser muy superado en el arranque.

Los rojillos, ayer de azul, ya supieron antes de empezar el partido que tenían asegurada la permanenci­a y quizás por ello salieron como relajados al campo.

Fuese lo que fuese, lo cierto es que los locales ya se adelantaro­n para el segundo 56 del partido. Un bonito gol rojiblanco en el que lo menos brillante fue el disparo final de Morcillo, que dio en Aridane antes de entrar.

Lo mejor de la jugada, una diagonal de Berenguer que desordenó a la defensa rojilla y un precioso taconazo de Villalibre en la frontal que dejó solo a un Morcillo que marcó su segundo gol de la temporada.

Arrancó casi furioso el Athletic que pudo marcar al menos otros dos goles en diez minutos desatados de Sancet y Villalibre. Cuando parecía encaminars­e el choque a una goleada bilbaína, llegó el empate de Osasuna en su primera llegada. Allí, Brasanac, libre de marca, desvió un centro de Juan Cruz.

Frenó en seco esa jugada a un Athletic hasta entonces muy superior y dio aire a Osasuna, que cambió el ritmo a otro más pausado. Reaccionó Jagoba Arrasate y conformó un once muy ofensivo, pero fue Sancet el que volvió a tener una ocasión. Un disparo de Kike Barja, bien detenido por Simón, abrió un segundo tiempo de ida y vuelta que desembocó en el 2-1 de Sancet que auguraron hasta seis llegadas peligrosas rojiblanca­s. Cabeceó un centro medido de Berenguer.

Ya en el asedio final navarro, cuando parecía que el Athletic iba a lograr dos victorias consecutiv­as por primera vez en la temporada, Budimir enganchó un gran cabezazo a centro de Enric Gallego y el Athletic enfrió sus escasas opciones europeas.

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MIGUEL TOÑA / EFE Kike Barja conduce delante de Berenguer.

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