CANTO DE SIRENA
DE QUE LAS APARIENCIAS ENGAÑAN sabe mucho Anna Mila Guyenz (Berlín, 1995). Sus facciones aniñadas y su gesto despreocupado enmascaran un carácter determinado y una madurez poco propia de su edad. «Empecé a trabajar a tiempo completo una vez cumplí los 19 años porque quería acabar el colegio. Y no puedo estar más contenta de haber tomado esta decisión. Esta industria puede ser muy dura, especialmente cuando eres joven y te tomas todo demasiado en serio y de manera personal», refexiona. Imagen de frmas como H&M, Bloomingdale’s, Boss o Polo Ralph Lauren, esta modelo alemana inició su carrera de la mano de Versace, abriendo el desfle de Versus en Londres en 2015, hecho que terminó colocándola en el escaparate del circuito internacional de la moda: «Yo nunca quise ser modelo, quería estudiar psicología, que es lo que al fnal acabaré haciendo. Pero eso no quita que esté muy agradecida por todo lo que me ha pasado. Me encanta lo que hago». Trabajadora tenaz, Anna Mila reparte su tiempo entre NuevaYork, donde se mudó hace dos años, y Berlín, su ciudad natal, a la que viaja siempre que puede para pasar tiempo con su familia y amigos, aquellos que, admite, le ayudan a no perder la perspectiva. «La parte más dura para mí ha sido aprender a vivir con las críticas. Si fallas un examen pues estudias más, pero imagina que a alguien no le gusta tu físico. Eso machaca tu autoestima y es mucho más difícil de procesar. El hecho de juzgar a las mujeres por su cuerpo es algo que defnitivamente tiene que cambiar en esta industria».