Harper's Bazaar (Spain)

AÑOS EN EL OLIMPO

Hablar de FOR HER de NARCISO RODRIGUEZ es hacer referencia a uno de los mayores éxitos de la perfumería moderna. ¿El secreto? Su ingredient­e talismán: el almizcle.

- Por Susana Blázquez

Magia y misterio. Probableme­nte estas dos palabras son las que mejor definan el poder de atracción de la fragancia que a lo largo de los últimos 15 años ha roto cualquier tipo de estadístic­a y expectativ­a. Y es que todo en ella, desde el nombre hasta el packaging, pasando por su enigmático jugo, ha sido un acierto tras otro. «Mi trabajo y mis perfumes han estado siempre orientados hacia la mujer, por eso se llama For Her. Es un homenaje a las grandes mujeres», concede el modisto norteameri­cano de origen cubano. «Un día, una gran diseñadora me dijo:‘encantada de conocerte, me apasiona For Her, lo uso muchísimo. De hecho, mi hija también lo lleva’. Me quedé impactado y a la vez emocionado porque ella misma tenía sus propios perfumes. Fue un enorme halago». Una anécdota que dice mucho de hasta qué punto para Narciso Rodriguez es importante implicarse en la creación de las fórmulas que van a llevar su nombre. «Me dio un shock el día que aprendí que muchas firmas de moda escogen sus fragancias cuando les presentan una decena de muestras sin más», sigue. Pero su caso no es este. Él sabía exactament­e los ingredient­es principale­s que compondría­n su primera propuesta olfativa. Por eso, entregó una muestra de aceite de almizcle egipcio a los perfumista­s encargados de crear la fórmula: Christine Nagel y Francis Kurkdjian.Y de ahí nació este singular elixir compuesto por un corazón de almizcle con facetas florales y amaderadas. «Para mí no existe un ingredient­e igual y en el momento en que lanzamos For Her no había nada parecido en el mercado. Es una fragancia muy femenina pero con un punto de misterio», continúa. El envoltorio de tan preciado jugo también tenía que ser una prolongaci­ón de los códigos que siempre han reinado en su etiqueta de moda: elegancia depurada, minimalism­o, sobriedad, (exquisita) sencillez, feminidad… Y en su obsesión por el detalle, no cejó hasta obtener ese frasco de corazón negro que tanto había soñado, consiguien­do en 2005 la primera patente de lacado interior de un frasco de perfume. El negro y el rosa blush de las letras y la caja se fundieron como nunca. ¿La musa de For Her? No podía ser otra que Carmen Kass, una mujer poderosa y frágil al mismo tiempo.Y una imagen de campaña con una fuerza y una delicadeza que quedará grabada en nuestras retinas para siempre. «Este perfume fue creado a base de instinto y ver la manera en que ha conectado con tantas mujeres en el mundo me llena de alegría y de gratitud». «God is in the details» es la frase que le gusta tomar prestada a Narciso de su arquitecto favorito Mies van der Rohe. El resto es historia.

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