Heraldo de Aragón

Las víctimas del falso carpintero alertan de que ha salido de la cárcel y puede volver a actuar

● El presunto estafador llevaba 16 meses en prisión sin ser juzgado e instan a evitar que provoque más engaños y perjuicios

- MARTA GARÚ

ZARAGOZA. Las víctimas del falso carpintero a las que engañó y se quedó con su dinero sin hacer los trabajos acordados y, en bastantes casos, causando importante­s perjuicios están en pie de guerra. El motivo no es otro que el haberse enterado de que José D. S. ha salido de la cárcel en libertad provisiona­l y podría estar empezando a ofrecer sus servicios a través de las redes sociales.

«Sabemos que está fuera y queremos alertar a otras personas para que no caigan en sus manos», decía ayer una de las 18 víctimas de Zaragoza representa­das por la Fiscalía en la causa abierta contra él. «Nos hemos quedado atónitas al enterarnos. Es bastante indignante y debería estar vigilado para que no vuelva a hacer lo mismo», expresó una perjudicad­a en nombre del resto.

La Policía Nacional detuvo al supuesto carpintero en diciembre de 2022 y desde entonces estaba en prisión provisiona­l, pendiente de ser juzgado por unos hechos que el Ministerio Público ya ha calificado como estafa continuada. De hecho, en su escrito de calificaci­ón provisiona­l pide para él una condena de cuatro años y medio de prisión. Sin embargo, los retrasos en la instrucció­n del caso han provocado que la causa se alargue y, finalmente, el imputado ha sido puesto en libertad, pendiente de ser citado cuando se fije la fecha del juicio.

Las denuncias presentada­s permitiero­n averiguar que, cuando fue arrestado, llevaba al menos un año y medio engañando a vecinos de Zaragoza y municipios como Utebo, Torres de Berrellén, La Puebla de Alfindén o La Muela. La Policía informó entonces de que José D. S. había estado dos años cometiendo los mismos engaños en Tarragona. Los Mossos d’Esquadra lo habían identifica­do como autor de veinte estafas y, cuando intuyó que podía ser descubiert­o, se mudó a Zaragoza.

El falso carpintero anunciaba sus «económicos» servicios a través de Facebook. No tiene habilidad para escribir bien –pues comete multitud de faltas de ortografía– pero sí para colarse en grupos numerosos, como los que se crean en localidade­s para compartir informació­n de interés ciudadano. Su manera de actuar consiste en hacer presupuest­os baratos, cobrar adelantos por trabajos que no cumple o ir a las casas, desmontar muebles, suelos o cortar encimeras que luego deja tal cual o coger dinero para comprar electrodom­ésticos que luego los clientes nunca ven. Cuando le llaman para reclamar, da mil excusas y, al final, bloquea a los perjudicad­os.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain