Ocho mil centauros del desierto
● Sariñena ve multiplicada por cinco su población gracias al poder de atracción de la Maratón Orbea Monegros. La víspera contó ayer con una prueba nocturna
SARIÑENA. ‘Yo estuve allí’ es el eslogan que reza sobre el escenario de la Maratón Orbea Monegros y que resume el espíritu de una prueba que este fin de semana atrae a alrededor de 20.000 personas hasta la localidad de Sariñena, es decir, su población multiplicada por cinco. Y es que a los 8.000 inscritos hay que sumar acompañantes, público, voluntarios y organizadores, que han convertido ya la localidad en un hervidero de amantes de las dos ruedas. La maratón, de 117 kilómetros, y la media maratón, de 81, arrancarán este sábado, aunque el ambiente ya fue excepcional ayer con varias novedades, entre ellas, una prueba nocturna.
Juan Quesada, vecino de Barcelona, fue uno de los muchos que quisieron fotografiarse junto al lema de la prueba. Al final, se trata de contar con un testimonio gráfico de su decisión de lanzarse a conquistar el desierto vivo de Europa y poder presumir de haber formado parte de un evento que ya admite el calificativo de legendario. Y no lo ha hecho solo. El catalán, que cumple su sexta participación, ha hecho crecer su grupo año tras año y en esta ocasión, ha traído consigo a otras 16 personas. «Tenían que vivir la aventura», dijo. A su lado su hija, Patricia, confirmó sus palabras señalando que el punto fuerte de la prueba está en el «espectacular ambiente», que ya fue evidente en la víspera, donde tuvo lugar la recogida de dorsales, la apertura de stands y las primeras actividades.
La cola para obtener un autógrafo de todo un titán de las maratones fue kilométrica. Otros dos catalanes, Jordi Alba y Daniel Serrano, esperaron con ilusión y ganas su turno para obtener la firma del ciclista vasco Ibon Zugasti. «Nos encanta», dijeron. Ambos son veteranos de la Maratón Orbea Monegros, a la que llegan con el aliciente de «superarnos a nosotros mismos y volver a disfrutar del ambiente».
«No hay ninguna igual; es espectacular. Los inscritos somos el centro de la prueba y se mima cada detalle», señalaron otros dos de los inscritos, Paco González y Julia Puértolas, de Barbastro, dando fe de uno de los aspectos mejor valorados por los inscritos.
Ambos han querido repetir tras la experiencia de 2022. En esa ocasión, la prueba cumplió 20 años, aunque hubo poco espacio para las celebraciones, ya que el objetivo de los organizadores Orbea, Ayuntamiento de Sariñena y Comarca de Los Monegrosestaba centrado en recuperar el pulso tras el obligado parón por la pandemia.
Después de conseguirlo y mantener alto el listón, la de este 2023 promete ser especial. De hecho, Orbea ha doblado su apuesta por el territorio con una nueva prueba nocturna y la introducción de varios puntos de animación. La salida de la Maratón, que tendrá lugar a las 12.00, incluirá batucada y comparsa de gigantes y, además, los avituallamientos contarán con música en vivo. La media maratón arrancará a las 13.00.
La salida de la prueba nocturna fue otro de los alicientes de la víspera del plato fuerte. Tuvo lugar a las 19.30 y contó con la participación de 55 inscritos. El reto estaba en llegar a la línea de meta antes de la medianoche. Por delante, 74 kilómetros y la ayuda de un GPS.
La línea de meta estuvo copada por hombres y mujeres habituales de la Maratón Orbea, que han visto la oportunidad de «afrontar un reto diferente», tal como explicaron los monegrinos Marcos Ainoza y Adrián Castejón. Aunque el ambiente se concentra en Sariñena, la Orbea Monegros
genera una importante repercusión económica y social en su zona de influencia, llenando gran parte de la capacidad hotelera en un radio de 100 kilómetros.
Cuenta con la implicación de todos los municipios que atraviesa: Albalatillo, Sena, Villanueva de Sijena, Castejón de Monegros, Valfarta y Peñalba. Según los estudios de sus promotores, el retorno es de 1,2 millones de euros. «Para nosotros, su impacto es excepcional, ya que nos coloca en el mapa y además, mueve la economía local, llenando comercios y establecimientos», indicó el alcalde de Sariñena, Juan Escalzo, que auguraba un gran éxito.