La agricultura ecológica suma 106.716 hectáreas
ZARAGOZA. Aragón alcanzó las 106.716 hectáreas de superficie ecológica en 2022. También el número de operadores registró un incremento hasta llegar a los 1.688, frente a los 700 que había en 2019 cuando se formó el Comité Aragonés de Agricultura Ecológica. En total, el incremento en superficie y operadores ha sido del 60% en estos tres años.
Son algunos de los datos más destacados de la memoria de actividad del pasado año presentada por Aragón Ecológico, en un acto que contó con la presencia del consejero de Agricultura, Joaquín Olona, y de la directora de Innovación y Promoción Agroalimentaria, Carmen Urbano.
Antonio Artal, presidente de Aragón Ecológico, acompañado del gerente, Pedro Fatás, fueron los encargados de presentar el balance. «Cualquier actividad en agricultura es susceptible de hacerse en ecológico», dijo Fatás, que cifró la explotación media de agricultura ecológica en Aragón en 77 hectáreas». Indicó además que el reto es la industria cárnica. «Aragón exporta más carne ecológica de la que produce, lo que significa que la trae de otras comunidades y la procesamos y exportamos desde Aragón». Por tanto, añadió, «hay hueco para más explotaciones ganaderas y el sector cárnico tiene espacio para crecer en lo que a producción ecológica se refiere».
En este reto coincidió Artal, en la necesidad de atraer a más ganaderos a la producción ecológica, si bien se mostró satisfecho del crecimiento registrado. «En estos tres últimos años el aumento ha sido exponencial en operadores, productores, empresas y hectáreas de cultivo», indicó, confiado en que siga creciendo en Aragón para poder llegar al 25% de superficie útil agraria en agricultura ecológica, objetivo que marca la Unión Europea.
En cuanto a si hay suficientes ayudas a la agricultura ecológica, Artal confesó que «siempre queremos más», pero que el hecho de que «haya subido el porcentaje de primas o ayudas en herbáceo a 25 euros la hectárea supone un aliciente, así como una ley de calidad que incluya ayudas para certificar o esa orden de ayudas que aún no ha salido publicada y que los agricultores esperan para poder acogerse».
El consejero Olona reconoció que el consumo de productos ecológicos arroja datos muy malos en la Comunidad. «Las ventas se basan en la exportación, pero el reto es que aumente de forma significativa el consumo local de productos ecológicos porque es prácticamente irrelevante». Lo cifró en apenas un 5% incluyendo en ese porcentaje los productos de Denominación de Origen, de Indicaciones Geográficas Protegidas, la marca C’Alial (sello de garantía de calidad de la DGA), los productos de Artesanía Alimentaria, y la propia agricultura ecológica».
Los consumidores, dijo incluyéndose, «somos poco aficionados a pagar la calidad diferenciada» en productos que «no pueden competir en precio con los de la agricultura convencional».