Primera huelga en el ayuntamiento por temor a perder entre 20 y 200 € al mes
● La falta de acuerdo sobre la fórmula para compensar el plus de antigüedad tras ser declarado ilegal ha llevado a los sindicatos a convocar mañana un paro general
HUESCA. Los trabajadores del Ayuntamiento de Huesca están llamados mañana a secundar la primera huelga de su historia. Todos los sindicatos con representación (CC. OO., CSL, CSIF, UGT y CGT) han convocado un paro total –tras varios parciales y actos de protesta– por falta de acuerdo para compensar la retirada del complemento de antigüedad, declarado ilegal, ya que podría suponer una pérdida de entre 20 y 200 euros al mes para alrededor de 300 empleados municipales, así como «una larga lista de agravios».
El concejal de Personal, Fernando Laborda, muestra su «total respeto» a la huelga y asegura que «aunque nos hubiera gustado llegar a un acuerdo para evitarla, en estos momentos es imposible porque tiene que tener tanto soporte económico como jurídico y carecemos de margen de masa salarial para crecer como ellos quieren y de un soporte legal para modificaciones generales de sueldo».
La convocatoria fue confirmada ayer por los representantes de CC. OO. (Juan Atienza), CSIF (Rubén Pascual), UGT (Nieves Gudé) y CGT (Mario Gonzalvo), quienes animaron a la ciudadanía a acudir también a la manifestación que partirá a las 18.00 desde la plaza de Santo Domingo y recorrerá el Coso Bajo, Duquesa de Villahermosa, López Allué, Moya, Coso Alto, plaza de la Inmaculada, calle del Parque y plaza de Navarra. «Si se merma la calidad de nuestro trabajo, se merma también la calidad de los servicios», resaltan.
El conflicto se inició tras dictaminar la Cámara de Cuentas de Aragón y el área de Intervención y la Secretaría General del Ayuntamiento que este complemento era ilegal. Para evitar que los trabajadores lo dejasen de cobrar de forma inmediata, el equipo de gobierno del PSOE, con apoyo de Cs, aprobó en pleno crear un complemento transitorio de carácter absorbible e iniciar negociaciones para regularizarlo. PP, Podemos Equo y Vox se abstuvieron.
Los sindicatos recuerdan que este plus se abona a las categorías más bajas como conserjes, jardineros, peones, auxiliares administrativos... Y en algunos casos, supone más de 100 euros en una nómina de 1.200, con lo que perderían una mensualidad entera. Además, denuncian que al transformarlo en un complemento personal y absorbible, «con las subidas acordadas en los siguientes Presupuestos Generales del Estado, los empleados públicos de Huesca no verán incrementado su salario como el resto y se reducirá ese plus hasta su desaparición».
Defienden que hay fórmulas para regularizar este complemento y seguir cobrándolo como crear un complemento ‘ad persona’ para los laborales «que existe en otras administraciones y es totalmente legal»; y para los funcionarios, un plus similar al complemento de eficiencia que han logrado los letrados de Justicia tras una huelga.
Una primera solución parcial
El concejal de Personal, Fernando Laborda, asegura que hasta ahora la mayoría de las sugerencias sindicales han tenido que ser desechadas «porque en lo económico iban por encima de la masa salarial o porque no tenían un soporte legal o jurídico». Hoy llevará una nueva propuesta «parcial porque no satisface por completo a todos los trabajadores», admite. Con ella, buscan garantizar que más del 90% de los 116 trabajadores beneficiados por el acuerdo de consolidación, que les permitirá ser fijos, sigan cobrando el plus «porque al tener la consideración de nuevo ingreso podrían perderlo totalmente», avisa.
Respecto a los otros 200 afectados, el edil reconoce que «no se puede llegar a un acuerdo a corto plazo por la dificultad técnica y económica». No obstante, ve con buenos ojos una de las últimas propuestas sindicales de desarrollar la carrera profesional empezando por los grupos inferiores», aunque tardaría tres o cuatro años.
Para los sindicatos, la última propuesta del PSOE es «completamente insuficiente porque deja mucha gente fuera». Pese a ello, están dispuestos a negociar «las horas que haga falta». «No pedimos un aumento de sueldo, solo que no nos lo bajen», insisten.
Además, denuncian otros «ataques» a sus condiciones laborales como la eliminación de la bonificación por conciliación y el premio de antigüedad, el recorte de los trienios por promoción, la falta de valoración de puestos y reclasificación, las jefaturas «a dedo», expedientes en muchos servicios o la «expulsión» de cuatro policías con 10 años de servicio.