Cristina Ouviña suma un nuevo trofeo a su palmarés
La base aragonesa, de 32 años y más de 100 veces internacional, conquista su primera Liga Femenina con el Valencia Basket
ZARAGOZA. A Cristina Ouviña le quedan muy pocas experiencias deportivas por vivir. Camino de los 33 años que cumplirá en septiembre, la aragonesa, que cuenta con una amplia trayectoria en el baloncesto nacional e internacional, ha saboreado ya prácticamente todos los sabores del deporte: ha conocido el dulce regusto del éxito, el amargo sabor de la derrota, la incertidumbre de hacer las maletas para jugar en el extranjero, la soledad de vivir a más de 5.000 kilómetros de Zaragoza... Sin embargo, todas estas experiencias le permiten disfrutar ahora de una madurez plena como jugadora. La base, internacional con la selección española, acaba de conquistar su primer título de la Liga Femenina en España con el Valencia Basket.
El nombre de Ouviña figura en una plantilla repleta de talento. Rubén Burgos ha dispuesto este curso de un equipo con nombres tan reconocibles como Queralt Casas, Alba Torrens o Raquel Carrera, que se ha destapado como una de las mejores jugadoras de la competición. En la fase regular de esta temporada, Ouviña ha promediado 21 minutos en 21 partidos, donde ha facturado 7,3 puntos, 3,6 rebotes, 3,5 asistencias y 10,7 créditos de valoración.
La jugadora aragonesa comenzó a jugar a baloncesto muy pequeña. Con apenas 8 años, ya encestaba sus primeras canastas en el CN Helios. Su paulatino crecimiento, tanto dentro como fuera de la pista, le llevaron hasta la primera plantilla del Mann-Filter, conjunto con el que debutó y se consolidó en la élite nacional.
Experiencia internacional Hasta que decidió hacer las maletas y probar fortuna en el extranjero. Su experiencia más dilatada fuera de España llegó en las filas del Wisla Can Pack polaco, donde permaneció cuatro temporadas (12-13, 13-14, 14-15 y 15-16). Después de ganar allí tres títulos de liga, puso rumbo a la fría Rusia. En el Nadezhda de Oremburgo, a menos de 100 kilómetros de la frontera con Kazajistán, jugó un año, antes de acercarse a su país de origen para competir con el Tango Bourges francés. Allí, como acaba de hacer en España, también levantó el título de la liga francesa, además de una Copa.
Es decir, a nivel de clubes, Cristina Ouviña ha ganado la liga en España, Francia y Polonia. Sin embargo, su trayectoria no termina ahí. Con España, es una de las jugadoras más destacadas, después de superar recientemente las 100 internacionalidades.