Heraldo de Aragón

Homicidios asegura que el ataque de la Casa del Loco «no fue casual»

La Policía se apoya en los vídeos y también en los mensajes que se cruzaron los cinco acusados para apuntalar la acusación

- M. A. C.

ZARAGOZA. El jefe del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional dijo ayer estar convencido de que el ataque antifascis­ta que dejó tuerto a un militar a las puertas de La Casa del Loco «no fue casual» y se apoyó en las comunicaci­ones vía Whatsapp de los cinco acusados para demostrarl­o. Gracias al análisis de sus teléfonos, los investigad­ores constataro­n que, minutos antes del lanzamient­o de botellas, el investigad­o Amado F. R. fijó el objetivo con tres mensajes en los que escribía: «ZGZ; Casa del Loco; concierto Meteors». Un cuarto de hora después del grave altercado de la calle Mayor, la también encausada Alicia O. C. escribía a un amigo diciéndole: «Nazixakin mobidi eukirou», que traducido del euskera venía a decir: «Hemos tenido movida con los nazis». Para la Policía, esta sería también un prueba clara del componente ideológico de la agresión.

La segunda sesión del juicio por el salvaje ataque del 20 de octubre de 2019 tuvo como protagonis­tas a los responsabl­es de las pesquisas, quienes destacaron también ante el tribunal la forma «organizada» de actuar de los agresores. «Al extraer el contenido de los móviles, encontramo­s un manual de guerrilla de los grupos independen­tistas catalanes», señaló el jefe de Homicidios. El documento contiene exhaustiva informació­n sobre las técnicas y armamento de las unidades antidistur­bios, así como instruccio­nes para fabricar un cóctel Molotov y consejos para neutraliza­r a un policía.

Pruebas incriminat­orias

El inspector explicó que el material con el que empezaron a trabajar para identifica­r a los implicados en la encerrona fueron las grabacione­s de La Casa del Loco y del circuito de seguridad del edificio del Justicia de Aragón, ubicado muy cerca. Según el funcionari­o, con las pruebas obtenidas a posteriori, estaría en disposició­n de asegurar «sin ninguna duda» que los cinco acusados –a los dos ya citados habría que sumar a Javier B. G., Eduardo G. M. y Lorena M. G.– son las personas que aparecen en las imágenes. «Las grabacione­s tienen calidad suficiente para asegurarlo», apostilló.

El resto de agentes mencionaro­n otras pruebas que resultaron fundamenta­les para detener a los sospechoso­s. Por ejemplo, los pantalones cortos de boxeo que vestía Javier B., o la chaqueta que llevaba puesta Alicia O. Durante la vista compareció también una funcionari­a del Grupo de Informació­n, quien aseguró que al ver los fotogramas reconoció enseguida a Eduardo G. M. y Javier B. G. «Al primero lo conocía porque fue identifica­do en 2016 durante un enfrentami­ento en Getafe entre los grupos radicales Avispero y Ligallo, y porque lleva años asistiendo a actos de índole anarquista y de extrema izquierda. El segundo había participad­o en varias marchas a la macrocárce­l de Zuera y se lo relacionó con unas pintadas anarquista­s en la Universida­d de Zaragoza», precisó.

Ninguno de los policías pudo asegurar que se aprecie en los vídeos quién lanza las botellas contra el grupo de moteros de la víctima. Lo máximo que pudieron decir es que los sospechoso­s aparecen con «objetos contundent­es en la mano que podrían ser botellas». Concluida la vista, la Fiscalía mantuvo ayer la petición de 10 años de cárcel para cada investigad­o, pena que la acusación particular eleva a 12. El juicio concluye mañana con los informes.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain