Tarmac considera que su concesión es incompatible con otro reciclador de aviones
● La empresa estima que la planta anunciada por López Soriano no tiene cabida en el aeropuerto
TERUEL. Tarmac Aragón, la empresa concesionaria del aeropuerto de Teruel para las labores de estacionamiento, mantenimiento y desmantelamiento de aviones, considera que el proyecto anunciado por la empresa López Soriano para construir una planta de reciclado de aviones puede ser incompatible con la concesión de la propia Tarmac, con un plazo de 25 años y con carácter de exclusividad en el complejo aeroportuario.
Desde Tarmac, empresa participada por el gigante europeo de la aviación Airbus, indicaron ayer que «la instalación de una planta de reciclado de aviones de la empresa López Soriano en el aeropuerto de Teruel, anunciada en los medios de comunicación, podría interferir con la concesión que la propia Tarmac ostenta actualmente para el estacionamiento, mantenimiento y reciclado de aeronaves».
Desde la compañía aeronáutica, estimaron que la implantación de la factoría de reciclado anunciada por la empresa López Soriano durante una visita a sus instalaciones del presidente del Gobierno aragonés, Javier Lambán, «podría ser incompatible con la concesión exclusiva para estas labores que mantiene Tarmac». Este operador mantiene actualmente una plantilla de 250 trabajadores ocupados en el mantenimiento de aviones y en su desmantelamiento. Su planta de reciclado ocupa a unos cincuenta empleados.
Fuentes del Gobierno de Aragón afirmaron que la instalación de la base de reciclado de aviones de López Soriano, que incluiría un centro e I+D+i de recuperación de materiales, es compatible con la concesión de Tarmac porque se implantará en «un área de expansión» del aeropuerto. Sostuvo también que la actividad «no será similar» a la que desempeña el actual operador del aeropuerto.
La misma fuente añadió que la nave y las instalaciones de López Soriano se ubicarían en una superficie de cinco hectáreas dentro de la ampliación del aeropuerto prevista con el Proyecto de Interés General de Aragón (PIGA) en tramitación. Este programa incrementará la extensión de la plataforma aeroportuaria en 200 hectáreas.