Las primeras sanciones por las tractoradas superan los 120.000 euros solo en Calatayud
Decenas de agricultores y ganaderos se concentran en Zaragoza para denunciar la «injusticia» que suponen En Teruel hubo una movilización de 500 personas
ZARAGOZA/TERUEL. Los agricultores y ganaderos de la comarca Comunidad de Calatayud aparcaron ayer sus tractores, dejaron las carreteras y trasladaron su protesta al centro de Zaragoza. No llevaron las reivindicaciones agrarias que estos días manifiestan en sus movilizaciones. La concentración, primero ante la Delegación del Gobierno en Aragón y después ante la Consejería de Agricultura del Gobierno de Aragón, quiso hacer visible y denunciar el alto precio que van a pagar por sus tractoradas.
Lo explicaron en la pancarta tras la cual un centenar de agricultores y ganaderos comenzó su movilización en la plaza del Pilar. ‘Más de 120.000 euros en multas por defender nuestros derechos’, rezaba el cartel y criticaron los manifestantes, la mayoría de los cuales ya han recibido las perceptivas notificaciones. «Y eso solo en la comarca de Calatayud, aunque en otras zonas no han puestos multas o al menos aún no han llegado», aseguraron.
El grueso de los expedientes sancionadores fueron enviados a los titulares del centenar de tractores que participaron durante tres días en los cortes alternos realizados en el kilómetro 200 de la autovía A-2. «Saca la cuenta, 100 tractores por dos multas de 200 euros cada una, una por invadir la autovía y otra por aparcar en ella, por tres días, ahí lo tienes, más de 120.000 euros», detalló uno de los agricultores, Alberto Peña, que aseguró que «eso no se lo esperaba nadie».
Los agricultores no entienden estas multas cuando los cortes se hicieron de forma pacífica, se pactaron con la Guardia Civil y se dejaron corredores para el paso de los vehículos sanitarios y de aquellos conductores que tuvieran necesidad extrema de continuar circulando. «Esas protestas no han provocado perjuicio alguno, los conductores lo entendían, las gentes de las comarca nos apoyaban y también los ayuntamientos», explicó Peña.
Este agricultor señaló que los alcaldes de los municipios de la comarca Comunidad de Calatayud han remitido a la Delegación del Gobierno en Aragón un escrito conjunto solicitando el archivo de dichos expedientes. Así lo hicieron también el jueves las organizaciones agrarias, que, tras las movilización organizada en la capital aragonesa, trasladaron al delegado del Gobierno, Fernando Beltrán, no solo sus reivindicaciones sino también un escrito solicitando y argumentando el archivo de esas sanciones.
Desde la Delegación del Gobierno aseguraron que por el momento no tienen información del número de expedientes sancionadores ni de la cuantía que suman. Explicaron que las multas son tramitadas «directamente» por la Guardia Civil.
«No somos delincuentes»
Los manifestantes de ayer, con cencerros y pitos y pancartas en las que podía leerse ‘No somos delincuentes, somos agricultores’, se reunieron con el delegado del Gobierno, que, según los agricultores, les trasladó que remitiría su petición al Ministerio de Interior y les avanzó que esta propuesta podría debatirse en el próximo Consejo de Ministros.
Luego fueron hacia la sede de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Alimentación situada en la plaza de San Pedro Nolasco. Lo hicieron con la intención de explicar su situación a algún representante del departamento que lidera Ángel Samper, ya que habían sido avisados de que el consejero estaba ausente, pero unos minutos antes de llegar hasta dicho edificio recibieron una llamada anulando aquella cita por «motivos de agenda». Muy decepcionados, los manifestantes optaron por designar a tres representantes para que accedieran al edificio a registrar una queja.
Marcha con apoyo político Mientras, 500 personas participaron ayer en una manifestación que recorrió las calles de Teruel convocada por una plataforma independiente de agricultores para protestar por la burocracia de la PAC, las medidas medioambientales, los bajos precios de los productos del campo y la competencia de otros países.
La marcha, que arrancó a las 9.30 del paseo del Óvalo, terminó a las 13.30 en la plaza de San Juan. Los manifestantes entregaron un manifiesto y sus reivindicaciones en la Delegación Territorial de la DGA –donde charlaron con el delegado, Benito Ros–, en la Subdelegación del Gobierno y en la Diputación Provincial.
El único incidente se registró en la Diputación, cuando un grupo intentó entrar a la fuerza en el edificio. Finalmente, los manifestantes desistieron y el presidente de la institución, el popular Joaquín Juste, les recibió en la puerta, donde se mostró comprensivo con sus reclamaciones y donde recordó que él mismo es agricultor. «Soy uno de los vuestros», les dijo, mientras se comprometía a trasladar sus quejas.
Entre los políticos que se sumaron a la concentración final en la plaza de San Juan, figuró la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, que criticó la burocracia «que ahoga» a los profesionales del campo y las normativas que se elaboran «en los despachos» sin conexión con la realidad.