Archivan la denuncia del PP por el papel de la mujer de Sánchez en el rescate de Air Europa
El Partido Popular registra una batería de preguntas para saber si la esposa del presidente actuó «de mediadora» y estudian llevar el caso a los tribunales
MADRID. Ni una semana ha tardado la Oficina de Conflictos de Intereses (OCI), adscrita al Ministerio que dirige José Luis Escrivá, en archivar la denuncia interpuesta por el PP contra Pedro Sánchez. Los populares cuestionaban que el jefe del Ejecutivo no se hubiera ausentado del Consejo de Ministros que aprobó el rescate millonario a Air Europa durante la pandemia pese a los supuestos «vínculos» de la compañía con su mujer y pedían averiguar si sería merecedor de una sanción de inhabilitación para ocupar un puesto de alto cargo de entre cinco y diez años. Este lunes, el PSOE dio a conocer la resolución de apenas folio y medio en la que se responde que no hay razones para iniciar una investigación al respecto.
Como respuesta, el principal partido de la oposición intensificará su ofensiva parlamentaria para esclarecer si Begoña Gómez «actuaba de mediadora o de conseguidora» de la trama corrupta y no descarta elevar el asunto a los tribunales. De momento, han registrado una batería de nueve preguntas sobre la relación empresarial con Air Europa y las reuniones mantenidas antes del rescate a la aerolínea, pero en Génova avanzan que exigirán también «explicaciones» sobre los viajes de la esposa de Sánchez a Ghana y sus encuentros con embajadores como revelan algunas de las informaciones.
El PP daba por acreditado en su denuncia que Air Europa financió la cátedra universitaria de Gómez desde apenas un mes después de que su marido llegara a la presidencia del Gobierno en 2018, «pese a que ella -reseñaba- no tiene titulación universitaria superior homologada». También entendía probada su «relación directa con los principales responsables de la compañía». Pero en su resolución, la OCI replica que Gómez «no tiene ni ha tenido relación laboral o profesional alguna que implique el ejercicio de funciones de dirección, asesoramiento o administración en dichas entidades», y que por lo tanto entiende que no se dan los requisitos para considerar que el jefe del Ejecutivo tendría que haberse abstenido de participar en los Consejos de Ministros en los que, como argüía el PP, se tomaron decisiones favorables a Globalia, matriz de Air Europa.
La noticia del archivo fue recibida con satisfacción por los socialistas y con recelo por los conservadores, que aseguraron haberse enterado de ella por los medios, antes que por los cauces oficiales. «Es llamativo que ni siquiera se hayan molestado en disimular y haya sido el propio PSOE quien haya dado a conocer la resolución desde Ferraz», apuntaron desde Génova, tras desacreditar a la OCI por haber sido «muy diligente» con los intereses del presidente y los de su esposa.
Base jurídica
La portavoz de la ejecutiva del PSOE, Esther Peña, aprovechó una pregunta sobre la relación entre Begoña Gómez y los directivos de Air Europa -que a su vez contrataron al comisionista del ‘caso Koldo’ Víctor de Aldama como asesor a finales de 2019- para hacer pública la decisión de la
OCI, en su habitual comparecencia de los lunes en Ferraz. «Dijimos que esa denuncia no tenía base jurídica y que solo buscaba tapar el escándalo que se cierne sobre Ayuso y su jefe de gabinete. Hago una apuesta: dirán ahora que Oficina está al servicio de intereses del Gobierno. Siempre es lo mismo. Si las instituciones le dan la razón al PP todo es perfecto y si no la demolición y el desprestigio de las instituciones es una práctica habitual», recriminó.
El vicesecretario de Política Autonómica y Local del PP, Elías Bendodo, aseguró, efectivamente, que la respuesta de la Oficina de Conflictos de Intereses» no ha sorprendido a su partido porque se trata de un «órgano del Gobierno nombrado por el Gobierno» y argumentó que, el hecho de que la denuncia hay sido archivada «no quita para que haya conflicto de intereses real del presidente del Gobierno».
Los populares insisten en que Sánchez comprometió 795 millones de euros con Air Europa pese a existir «vínculos de naturaleza económica y profesional con su mujer», por lo que cometió así una infracción grave que se sanciona con entre cinco y diez años de inhabilitación.