El momento de la verdad para el Barça
El equipo azulgrana defiende ante el PSG la renta lograda en el partido de ida (2-3) para avanzar a las semifinales
BARCELONA. El Barça necesita rematar la faena hoy (21.00) en el Lluis Companys ante el PSG y colarse en las semifinales de la Liga de Campeones. El conjunto que dirige Xavi Hernández se impuso por 2-3 en el Parque de los Príncipes en el partido de ida y tiene en la mano la posibilidad de colarse entre los cuatro mejores de Europa y llenar aún más de ilusión las venas de todo el barcelonismo, repletas en una semana clave en la que también espera el Real Madrid en el Bernabéu. Xavi tendrá a su disposición a Pedri y Frenkie De Jong, más rodados que hace una semana, y también a una afición que arropará a los suyos en busca de una noche mágica.
«Es un momento importante para el barcelonismo. Hemos recuperado la ilusión que tanto ha faltado durante la temporada, se nota en la calle. Yo estoy eufórico e ilusionado de estar donde estamos», afirmó Xavi ayer en la rueda de prensa previa al partido de su equipo contra un PSG frente al que no conviene confiarse. El técnico de Tarrasa vivió un día prepartido atípico con la visita del presidente Joan Laporta
para «dar confianza» al equipo y demostrar a la plantilla que es «un culé más».
La alegría del presidente no es para menos. El Barça ha dejado atrás los tiempos de la crispación y se ha adentrado en un momento de la temporada en el que parece que todo va rodado. El equipo gana, la comunión con la afición es total, Xavi se ha olvidado de la prensa y hasta la enfermería comienza a vaciarse. Es el momento perfecto para encarar el tramo decisivo del curso y medirse a un PSG que no pondrá las cosas sencillas pese a la derrota del partido de ida. Lo sabe Xavi que no quiere lanzar las campanas al vuelo y avisa del peligro del rival. «Lo veo igualado. Es uno de los mejores equipos del mundo y no especulará. Espero un partido como el de la ida», anticipó.
Buena dinámica
Pese a las advertencias, Xavi en consciente de que la dinámica sonríe a su equipo. El Barça llega a la cita después de sumar 26 de los últimos 30 puntos en Liga y con antecedentes favorables en la eliminatoria contra el Nápoles y también en la ida con el PSG. Lo sabe el de Tarrasa y también una afición que prepara una caldera pocas veces vista desde que el Barça juega en el Lluis Companys. Se espera colgar el cartel de ‘no hay entradas’, como dirían los clásicos, y el ambiente será el de las grandes noches, o eso al menos espera Xavi. «Debe ser una noche mágica, como en el Camp Nou», subrayó el técnico catalán.
Para vivir esa noche mágica, Xavi podrá contar con todos sus jugadores a excepción de los lesionados de larga duración Balde y Gavi, así como los sancionados Christensen y Sergi Roberto. El PSG, por su parte, acude a la cita con todo su arsenal a excepción de los lesionados Kimpembe, Kurzawa y Sergio Rico.