Las plazas de San Francisco y de los Sitios serán declaradas zonas saturadas de negocios hosteleros
Se sumarán a las 15 ya existentes en la ciudad donde no se están concediendo más licencias de actividad
ZARAGOZA. Zaragoza declarará zonas saturadas las plazas de San Francisco y de los Sitios, una medida especialmente reivindicada por los vecinos por el elevado número de bares y locales de hostelería que se han implantado allí en los últimos años y el ruido que generan. El gobierno municipal impulsará un acuerdo el próximo 9 de mayo para comenzar con los trabajos de estudio y análisis de estas áreas y la selección de las calles concretas que abarcarán, y que supondrá además desde ese momento la paralización de la tramitación de licencias para abrir nuevos negocios.
El concejal responsable de Urbanismo, Víctor Serrano, incidió ayer en que el Ayuntamiento es «sensible» a las peticiones ciudadanas y a la alta cantidad de quejas registradas recientemente en estos entornos. Se sumarán así a las otras 15 delimitaciones que existen en la ciudad con esta denominación por la alta ocupación hostelera y actividad concentrada que afecta al descanso de los vecinos y a los propios establecimientos y que, añadió el edil, «hace compleja y difícil la convivencia en la escena urbana».
Delimitación pendiente
Los técnicos municipales elaborarán un informe con una primera propuesta de calles que será aprobada en dos semanas, para luego salir a exposición pública durante 15 días y después ser ratificada en pleno. No obstante, los estudios posteriores podrían suponer alguna variación, ampliación o reducción en las vías finalmente afectadas. En el caso de San Francisco, por ejemplo, Serrano precisó que podría ser «más conveniente» incluir el distrito Universidad, aunque es en la plaza donde se concentran las mayores quejas.
En principio, no se eliminará ninguna de las zonas ya existentes, aunque desde Stop Ruidos advierten de que alguna de ellas ha dejado con el paso del tiempo de tener tanta presencia de estos negocios. No obstante, el gobierno se abre a estudiar esta posibilidad si los informes así lo determinan.
Lo mismo apuntan desde Cafés y Bares. Su gerente, Luis Femia, indicó que solicitarán tener acceso a los informes, aunque añade que todas las calles deberían adaptar su situación jurídica a su realidad social. Cita Zumalacárregui, por ejemplo, una de las actuales zonas saturadas y donde ya no queda ningún negocio. También Moncasi o la
Puerta del Carmen, donde suman como mucho tres cada una. «Desde hace 20 años, los hábitos de consumo y de ocio han evolucionado», declaró.
En cualquier caso, Serrano concretó que cualquier modificación «se hará en cumplimiento de la normativa estatal vigente y de la propia ordenanza municipal». Según las reglas del Consistorio, se podrán calificar como zonas saturadas aquellas «en las que se produzcan graves molestias a la vecindad por la afluencia de público a los locales o actividades sujetas, motivadas por la real o previsible saturación en el número de estos establecimientos».
Asimismo, según precisó, en los estudios que motiven la decisión se especificará «el ámbito geográfico de la zona, establecimientos existentes, prohibiciones, limitaciones o restricciones respecto de las licencias y sus ampliaciones, así como de los horarios de apertura y cierre». El efecto más inmediato de la declaración será la suspensión de las nuevas licencias urbanísticas, de actividad y de funcionamiento para «bares y cafeterías, bares con música y ‘pubs’, cafés-teatro y cafés-cantante, discotecas, salas de fiesta, tablaos flamencos o restaurantes».
La última vez que se revisaron estas catalogaciones fue en 2005, de ahí que varios colectivos adviertan de que podrían haberse quedado obsoletas. Tienen la denominación de saturadas las zonas de Moncasi, Zumalacárregui, Manifestación, plaza de Santa Cruz, León XIII, Doctor Cerrada, Predicadores, plaza de San Miguel, Doctor Casas, Corona de Aragón, Doctor Horno, Florentino Ballesteros, María Moliner, ja Magdalena y la avenida de Valencia y la calle de Santander.
Ordenanza del ruido
Serrano ha hecho este anuncio poco antes de que se debatiera en el pleno celebrado ayer una moción presentada por ZEC relacionada con este asunto. El grupo municipal pedía convocar las mesas de trabajo para modificar el borrador de la nueva ordenanza del ruido que se propuso en 2022 y aprobarla en un plazo de 10 meses. La propuesta, sin embargo, ha decaído por los votos en contra del PP y Vox.
El concejal de ZEC Suso Domínguez defendió que se trata de «una cuestión de salud y también de convivencia que requiere de un tratamiento integral» y reclamó la actualización del mapa del ruido. «Es importante que tengamos plazos concretos porque estamos perdiendo un tiempo precioso», insistió.
Víctor Serrano, por su parte, explicó que el Área de Medio Ambiente ha preparado todos los informes previos para que su elaboración pueda salir a licitación próximamente. Recordó, además, que la tramitación de una normativa de estas características requiere de un plazo mínimo de dos años.
Mientras, el socialista Horacio Royo acusó al gobierno municipal de agravar el problema con la ordenanza de veladores, que ha supuesto, a su juicio, «un descontrol en cuanto a la ocupación del espacio público por negocios privados».
Armando Martínez, de Vox, pidió «no echar más leña al fuego enfrentando a los hosteleros con los vecinos».