Medina del Campo, una villa volcada con la historia
LA VILLA VALLISOLETANA fue escenario de algunos de los hechos más señalados de la historia peninsular de la Edad Media y comienzos de la Edad Moderna. Allí murió y redactó su testamento Isabel la Católica, y en el imponente castillo de la Mota estuvieron presos Juana la Loca y César Borgia –entre otros–; sus calles recibieron la visita de San Vicente Ferrer y asistieron al nacimiento de personajes ilustres como Fernando de Antequera –rey de Aragón como Fernando I–, y sus hijos Juan II de Aragón –rey de Navarra, Aragón, Sicilia y Mallorca– y Enrique de Trastámara, infante de Aragón. Además, Medina del Campo fue escenario de un terrible episodio –la Quema de Medina, en 1520– que jugó un papel decisivo en el desarrollo de la rebelión de los comuneros.
Todas estas circunstancias han dejado su poso en la población, y sus habitantes y autoridades han sabido aprovechar el riquísimo legado histórico de la villa para promover el desarrollo turístico de la localidad. Así, además de contar con una de las procesiones de Semana Santa más antiguas de España –según la tradición instauradas por San Vicente Ferrer–, declaradas Fiesta de InterésTurístico Internacional, Medina se vuelca cada año en la celebración de su Semana Renacentista, que todos los meses de agosto transporta a vecinos y visitantes a un espectacular viaje al pasado, con buena parte de la población participando en todo tipo de eventos, entre los que destaca la recreación de la Quema de Medina. Este espectáculo rememora el triste episodio, en el que los vecinos – ataviados como imperiales o comuneros– recorren la villa a la luz de las antorchas.