La meca del cine
A TRAVÉS de tres relatos autobiográficos y seis historias de ficción (todas ellas de poca extensión, a excepción de Al Oeste de las Rocosas), el guionista Daniel Fuchs (1909-1993) nos muestra los recovecos más sorprendentes de Hollywood. Lo hace con un profundo amor y un sincero respeto por la industria cinematográfica, denostada en ocasiones por los medios “serios” con el pretexto de que es un mero entretenimiento sin alma.
Fuchs escribió varias novelas cuando era profesor en su Nueva York natal, pero el éxito solo le sonrió cuando probó fortuna en la soleada California. Llegó con un contrato de trece semanas y aquello le gustó tanto que decidió quedarse.
Historias de Hollywood nos brinda una jugosa perspectiva sobre la época de los grandes estudios –Fuchs trabajó para la Warner, MGM o RKO–, sorteando la autocomplacencia y denunciando también la superficialidad y ansiedad de quienes viven allí. En boca de uno de los personajes, afirma que “todo el mundo está muerto de miedo todo el tiempo. Las grandes estrellas, los guionistas, los productores: todos temen levantarse una mañana y descubrir que han perdido el toque mágico con el público”. John Updike, que firma el prólogo, señala que estas ficciones “narran una historia matizada de febriles auges y caídas, emocionantes éxitos y fracasos progresivos, de neurosis y frustración envueltas en sol y buganvillas”./