La Fundación Atapuerca en Irán
LA COLABORACIÓN entre un equipo mixto iraní-español, en el que participa la Fundación Atapuerca, ha dado sus frutos. El hallazgo en una excavación de la cueva de Kaldar de piedras con una antigüedad entre 36.000 y 54.000 años evidencia la remota presencia humana fuera de África. El descubrimiento refuerza el papel de Irán en el panorama arqueológico paleolítico mundial. Las herramientas están asociadas a restos de fauna, según señala el informe aparecido en Scientific Reports . Asimismo, el texto proporciona datos acerca de cómo esas poblaciones sobrevivieron al clima y se desplazaron al continente europeo.