Victoria en Thionville
PICCOLOMINI apareció por sorpresa el 7 de junio con 10.000 imperiales y cogió al ejército de Feuquières de 10-14.000 soldados disperso, dividido en cinco campamentos de dos o cuatro regimientos situados en círculo alrededor de Thionville, antes de que hubiera podido unirlos con trincheras y empalizadas para proteger sus líneas. Además dos de los cuarteles estaban situados al sur, tras el Mosela, y otros dos al sudoeste, tras el Fensch y el Weymerange, de modo que se encontraban demasiado lejos para socorrer el cuartel de Grancey, situado más al norte, en la línea de marcha imperial. En cabeza iba la vanguardia de Beck, seguida de la infantería de Switz, y en retaguardia la caballería de Gonzaga. Beck destrozó uno a uno a siete de los 15 regimientos franceses que se hallaban al norte deThionville o que acudieron de refuerzo. La lucha terminó a las 11 de la mañana y Feuquières levantó el asedio y replegó los restos de su ejército al sudoeste tras cruzar el Moselle, y formó una línea de batalla improvisada en Florange, al sur del arroyo de Fensch, protegido por la corriente y las elevaciones de la orilla. El ala izquierda la formaba Saint Pol con la mitad de la caballería; Grancey, el centro con la infantería; y la derecha, el resto bajo el propio Feuquières. Piccolomini aprovechó el receso para sacar la artillería española deThionville y llevarla a la línea de frente, y a las 5 de la tarde comenzó a bombardear a los franceses desde el otro lado del río. Estos retrocedieron de la orilla para no ser pulverizados y con la confusión del repliegue y el humo tiraron repetidamente contra uno de sus regimientos. Aprovechándose del caos, el imperial Soyé cruzó con sus arcabuceros el río con el agua al cuello y fue seguido por el puente de Daspisch por el grueso, que entabló combate pica con pica contra los franceses. Feuquières, gravemente herido, decidió organizar un contraataque con toda la caballería, pero fue contenido por Beck. Agolpados franceses e imperiales en el puente, La puntilla la dió Gonzaga cuando con sus jinetes amplió el frente al cruzar el Weymerange para amenazar la izquierda francesa, aún sin luchar. Entonces, ese flanco se desmoronó y la caballería gala huyó a Metz, arrastrando a todo el ejército. Feuquières fue capturado y murió al poco tiempo, perdiendo 6-10.000 soldados en la debacle.