LA PÉRDIDA de la inocencia
■ Después de Morir en primavera, novela en la que a través de las vivencias de un joven reclutado por los nazis se recrea el final de la Segunda Guerra Mundial con enorme verosimilitud y cierto grado de indulgencia, se publica una nueva obra del prestigioso autor alemán Ralf Rothmann (1953). Con apenas doce años, Julian vive en un pequeño pueblo de la cuenca del Ruhr con sus padres y su hermana Sophie. En casa todo gira en torno a las instrucciones de su madre, de salud endeble, y de un padre minero no especialmente cariñoso. Uno de esos veranos, no tiene más remedio que quedarse a acompañar a su padre durante las vacaciones y es cuando cobra mayor relevancia la presencia de su vecina, Marusha, una joven de quince años.
Rothmann retoma el tema de la pérdida de la inocencia como hilo conductor. Pero lo hace de un modo muy sutil con el que permite al lector comprender situaciones que el joven protagonista por sus reacciones parece no estar preparado para entender.