TODO un manifiesto
■ En 2013, con Librerías, Jorge Carrión consiguió ser finalista del premio de ensayo de la editorial Anagrama.
El libro era un sentido homenaje al mundo de las librerías en un recorrido por su historia y por diferentes y emblemáticas librerías de todos los continentes. Librerías se convirtió en un fenómeno editorial internacional. Desde entonces, Jorge Carrión (Tarragona, 1976), escritor, viajero y colaborador en diferentes publicaciones, ha seguido escribiendo sobre el mundo del libro y todo lo que le rodea. Su nuevo volumen, Contra Amazon, contiene una colección de artículos periodísticos y reportajes que ya han sido publicados en revistas culturales.
Carrión viaja por librerías y bibliotecas del mundo. Alaba las librerías con muchas dosis de espectacularidad y también de excelencia, pero todavía le interesan más las originales iniciativas, muy modestas, que buscan acercar el libro a poblaciones y colectivos muy alejados, como las iniciativas llevadas a cabo en Colombia –la Canoa Literaria y la Muloteca Viajera– y en Honduras –las Mochilas Viajeras–. Se entrevista con importantes y experimentados libreros y con personas, como el argentino Alberto Manguel, autor de Una historia de la lectura, muy vinculados al mundo de los libros y las bibliotecas. Hay reportajes también dedicados a Borges, a Curzio Malaparte y a lugares como Capri, Nápoles, Seúl y Japón. El capítulo más emblemático del libro, y con el que se abre, lleva por título “Contra Amazon. Siete razones/un manifiesto”, que se publicó en la versión online de la revista Jot Down en abril de 2017. Este artículo condensa las ideas de fondo que Carrión está transmitiendo desde hace años en sus libros y artículos.
Para Carrión, el modelo Amazon es el antagonista de lo que él entiende por librería. Su manera de entender el negocio ha alterado de manera radical “las relaciones tradicionales entre los lectores y los libreros”. En primer lugar, han eliminado el factor humano, robotizando la cadena de distribución y eliminando las prescripciones; solo importa lo que más vende, lo que tiene una salida más comercial, el producto más visible. Este modelo, que prioriza la rapidez por encima de todo, no es un negocio aséptico; para Carrión, “están moldeando el futuro”. Por ello, reivindica el valor de las librerías como espacios donde el tiempo se dilata. Las que mejor representan esa resistencia necesaria y mínima son las librerías independientes de barrio, lugares que se convierten, gracias al oficio de los libreros, en centros emocionales y culturales.