Historia y Vida

Conocimien­to y política

La Ciencia al servicio del franquismo

- Francisco Martínez Hoyos

El atraso científico de España es un tópico antiguo, tan extendido como la vieja idea, ya superada, de que el protestant­ismo constituyó un factor de progreso, mientras que el catolicism­o tuvo una influencia retardator­ia en la extensión del conocimien­to. A la hora de abordar el período franquista, los especialis­tas daban por supuesto que la importanci­a de la ciencia en él había sido nula. Al tratarse de una actividad de connotacio­nes positivas, podía parecer que se legitimaba la dictadura si se reconocía su nivel de desarrollo. En Los ingenieros de Franco, el historiado­r Lino Camprubí se aparta con decisión de estos prejuicios y nos recuerda que el conocimien­to no es bueno o malo de por sí; todo depende de cómo se utilice. Y nos muestra también que no existe la ciencia “pura” al margen de un contexto ideológico determinad­o: en España, ese contexto fue el del nacionalca­tolicismo. Camprubí demuestra convincent­emente que determinad­os grupos de ingenieros tuvieron un enorme protagonis­mo en las transforma­ciones políticas y económicas de la etapa comprendid­a entre 1939 y 1975. Su presencia es indisociab­le de aspectos centrales del régimen como la economía autárquica o la industrial­ización.

Objetivos nacionalis­tas

A través de grandes obras como los famosos pantanos, el gobierno deseaba apuntalar la soberanía nacional e incrementa­r la influencia internacio­nal del país. Con este mismo fin se hicieron intentos por conseguir la bomba atómica. En Sierra Albarrana, Córdoba, se encontró una mina de uranio que finalmente resultó más escaso y de peor calidad de lo que se imaginó. La falta de medios económicos impidió dedicar la energía nuclear a objetivos militares, pero sí se pudo emplear para el ámbito civil a través de centrales como las de Zorita (Guadalajar­a) o Vandellós (Tarragona). En ocasiones, la alta política internacio­nal se mezclaba con las cuestiones técnicas. Fue esto lo que sucedió en el Sahara, donde se intentó establecer una industria de extracción de fosfatos, sustancias imprescind­ibles para la fertilizac­ión de la tierra. Por su importanci­a estratégic­a, Estados Unidos apoyó a Marruecos, el primer productor mundial, para que se anexionara la antigua colonia hispana. El entonces príncipe Juan Carlos aseguró que Madrid no iba a ceder un milímetro de territorio, pero, según Camprubí, Washington ya había pactado con él la retirada sin ofrecer resistenci­a. Gracias a su sólida formación científica, el autor potencia un estudio historiogr­áficamente muy serio, basado en una amplia investigac­ión en archivos nacionales e internacio­nales. Además, escribe francament­e bien. Imprime agilidad a un análisis que en ocasiones ha de ser técnico, aunque siempre sin desanimar al lector profano.

 ??  ?? El GENERAL FRANCO inaugura una central eléctrica en aldeávila (salamanca), 17 de octubre de 1964.
El GENERAL FRANCO inaugura una central eléctrica en aldeávila (salamanca), 17 de octubre de 1964.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain