la famosa carta, ¿falsificada?
Es imposible despejar las sospechas sobre la autenticidad de la misiva comprometedora de María Estuardo a Babington.
la correspondencia de María Estuardo era interceptada regularmente por Thomas Phelippes, experto criptógrafo al servicio de Walsingham, ministro de la reina Isabel. En el proceso celebrado contra ella, María insistió en que la carta del 17 de julio de 1586, dirigida a Anthony Babington (dcha.), en la que ella daba su aprobación al asesinato de Isabel, había sido falsificada.
a María no se le permitió contar en el juicio con consejeros legales. No se pudo verificar la autenticidad de la carta, porque la original había sido destruida. Además, se sabía que Phelippes había añadido a la misiva un postdatum en el que María preguntaba las identidades de los que asesinarían a la reina. Si esa parte de la carta no era auténtica, bien podía ser falsa la carta entera.
la Estuardo insistía en que, pese a lo que había escrito en el pasado a su embajador en Francia acerca de una invasión de Inglaterra, ella nunca había aprobado el asesinato de su prima Isabel. Walsingham, sin embargo, tenía la certeza de que, mientras viviese María, los conspiradores católicos contra Isabel tendrían a una sucesora legítima en torno a quien unirse. Se ha sospechado, pues, que la sentencia de María Estuardo se basó en una falsificación del ministro para poder justificar ante la reina Isabel la condena a muerte de su prima.