La atracción oriental
IRÁN Y EL MUNDO HISPANO CARA A CARA
Conocen a los hermanos Manuel y Fernando Martínez de la Escalera? Estos naturalistas son una buena muestra de los injustos olvidos de la historia. En 1899 protagonizaron un novelesco viaje por varias naciones que los condujo hasta Irán, donde se dedicaron a recoger distintas especies de insectos y plantas. En el mismo país acabó, por esas fechas, Jaime de Borbón, futuro pretendiente carlista, que lo recorrió como oficial del zar de Rusia. Estos y otros ejemplos evidencian que España e Irán están más relacionados de lo que parece a primera vista. En realidad, son muy antiguos los vínculos que los unen. Ya en el siglo xv, el castellano Ruy González de Clavijo, en una misión diplomática, visitó lo que entonces se denominaba Persia y reflejó en una crónica sus impresiones.
El libro Una vieja amistad, coordinado por los historiadores Fernando Camacho y Fernando Escribano, dibuja un fascinante recorrido por estos lazos históricos y culturales. Tomadas en conjunto, las diversas aportaciones ofrecen una mirada muy amplia, al integrar no solo las relaciones del estado asiático con el nuestro, sino también una pluralidad de enfoques metodológicos que abarcan la historiografía, la ciencia política o la literatura comparada.
Rescatar a un pionero
El volumen nos permite conocer a personajes tan insólitos como García de Silva y Figueroa (1550-1624), el embajador que Felipe III envió a Persia para alcanzar una alianza contra el enemigo común, el Imperio otomano. Este proyecto no llegó a buen término, pero el viaje sirvió para que el emisario hispano se convirtiera en un pionero de la arqueología. Él fue el primero en darse cuenta de que unas ruinas correspondían a la Persépolis de la época aqueménida, la gran capital incendiada por Alejandro Magno. En uno de los capítulos, el fotógrafo Manolo Espaliú sigue el periplo que efectuó De Silva. El resultado es un sugestivo texto ilustrado con las imágenes tomadas por el autor. La distancia geográfica, como podemos ver, no siempre significa que dos comunidades tengan que vivir de espaldas. En este caso, contra lo que se podría suponer, el entendimiento ha dominado los contactos hispanopersas.
MONOGRAFÍA