Hay más que canguros en australia
El mapa del juego es dos veces más grande de lo que vimos en Forza cuatro zonas y hay mucho que hacer en sus carreteras. Además de es Htoohriazyonca2r. t EelleessqcueneadreiostdroezAaur, s ctraarlriearaesstcáadlievjiedriadso .e. n
Carreras en circuitos. Un clásico entre los clásicos. Un circuito, 12 participantes y unas pocas vueltas para demostrar quién es el que manda en el festival. Además, por primera vez, podemos diseñar la carrera a nuestro gusto: vueltas, clima, hora, etc... Señales de peligro. El escenario australiano está plagado de estas señales de peligro. Lo interesante, claro, es pasar de la advertencia y practicar el deporte nacional: el salto del canguro aunque, eso sí, sobre cuatro ruedas y desde acantilados bestiales. Experiencias vitales. Otro clásico de la saga. Se trata de pruebas en las que conducimos un modelo concreto de coche en una experiencia idílica, como llegar a un lugar antes de la puesta de sol, aprovechar unas obras para hacer el cabra y mucho más. Eventos de exhibición. En estas carreras competimos contra vehículos poco convencionales, como un helicóptero, un caza, un tren, unas lanchas y hasta un dirigible. Los eventos están repletos de saltos y momentos realmente espectaculares. Carrera por senderos. Se trata de llegar a un punto concreto del mapeado conduciendo por todo tipo de caminos: asfalto, tierra, arena, agua, por mitad de un bosque, etc... Son carreras con poco frenado, así que es más difícil adelantar a los rivales. Coches abandonados. Australia esconde mucho más que animales exóticos y naturaleza exuberante. En el mapeado podemos encontrar hasta 15 coches abandonados que podemos restaurar para disfrutar después conduciéndolos a la gloria.