LA ventAjA coMpetitivA de pLAystAtion vR
Reconozco que tenía mis dudas acerca de PlayStation VR. Y no me refiero a si las gafas funcionarían bien o a si se iban a retrasar en el último momento, sino a la acogida que iban a tener entre el público general. Porque una cosa es que en la redacción todos hayamos disfrutado con alguno de los juegos que se han lanzado junto al dispositivo, y otra muy distinta es convencer a la gente para llevarse "el cacharro" a casa, por ese precio, sin haberlo probado antes y sin saber hasta dónde va a llegar esta nueva tecnología.
En Hobby Consolas, hemos hecho un esfuerzo para acercaros las sensaciones que produce la realidad virtual, pero, por más que se cuente, hasta que uno no lo prueba, no queda convencido. Y, precisamente, esto es lo que titula mi columna. La mejor campaña de publicidad que podía hacer Sony —su ventaja competitiva— era dejar que los usuarios probaran las gafas. Y hablo por experiencia propia: cada vez que le he puesto las PS VR a alguien —amigos o hermanos—, éste ha terminado preguntándome dónde se las podía comprar y cuál era el precio de venta.
Entre ferias como Madrid Games Week 2015 o Barcelona Games World 2016, eventos en tiendas y un showroom dedicado (VR Gate), cualquier interesado en ellas puede probarlas antes de comprar. Y, si la primera impresión es buena, creo que el elemento definitivo está en su facili- dad de uso. Mientras que instalar un headset HTC Vive nos ha resultado algo engorroso (requiere configurar el ordenador, además de colocar los sensores y enchufarlo todo), el aparato de Sony es prácticamente "plug and play": la cámara reconoce perfectamente nuestra posición, y los mandos PS Move se comportan de un modo muy fiable.
Por si esto fuera poco, PS VR se puede encontrar en cualquier tienda, con juegos en formato físico y a menor precio que la competencia (que ha tenido una distribución limitada). Si se me permite la expresión, es la realidad virtual más accesible. En definitiva, puede que PS VR no sea el dispositivo que ofrece una imagen más nítida de todos los que hay en el mercado, o que su sistema de control con PS Move no sea tan sofisticado como los controles sinápticos que hemos probado en PC, pero su ventaja está en que es el único dispositivo de realidad virtual pensado para el gran público, para la gente que está dispuesta a sacrificar algo de rendimiento en favor de un precio menor o que no quiere pasar por sesiones de calibración, sino disfrutar inmediatamente. Parece una jugada maestra para conseguir una gran cuota de mercado estas Navidades. Ahora, lo que nos toca esperar es que también se acuerden de los jugones más tradicionales y empiecen a lanzar juegos más exigentes, que no sean simples "experiencias".
El elemento definitivo de PS VR es su facilidad de uso, el precio asequible, la instalación... La clave está en su cercanía al gran público