mass effect andromeda
Volvemos al espacio para contaros si la vida fuera de la Tierra merece la pena
Hay un nuevo comienzo para todos. Del mismo modo que el arca Hyperion viaja a otra galaxia para empezar de cero, Masseffect inicia una nueva etapa tras la celebrada trilogía original.
El argumento se sitúa 600 años después: todas las razas importantes de la Vía Láctea viajan a la galaxia más cercana, Andrómeda, para colonizar los llamados "mundos paradisiacos", entornos potencialmente habitables. Cuando el protagonista de nuestra historia despierta de su criosueño, descubre que una extraña nube llamada la Miasma infecta la galaxia y que los mundos que buscaban parecen un caos... En ese punto, hemos de embarcarnos en una lucha por encontrar las naves del resto de razas colonas, indagar en el origen de la Miasma y frenar los planes de los Kett, una raza hostil que parece tener planes ocultos detrás de este lío... Por supuesto, un Masseffect nunca es lineal del todo y nuestro primer cometido es decidir si seremos hombre o mujer. En esta entrega, si somos chico, la chica pasará a ser nuestra hermana y viceversa. Ambos se relacionarán en el juego. A partir de ahí, toca viajar por Andrómeda para superar diferentes misiones, que resultarán familiares para los veteranos: las principales nos sirven para reclutar a los seis miembros de nuestra tripulación y avanzar en la trama, pero hay decenas (centenares) de secundarias que nos proponen tareas de todo tipo, desde simples "recados" hasta la búsqueda de recuerdos de nuestro padre (el Pionero original de la aventura, que nos ha cedido ese puesto), misiones de lealtad o la terraformación.
Construye nuevos mundos
Una de las principales novedades es el medidor de viabilidad, que nos indica hasta qué punto son habitables los seis planetas principales del juego. A medida que lo exploramos y mejoramos (resolviendo misiones, colocando estaciones de avanzada o activando tres monolitos bien protegidos), el medidor mejorará e, incluso, haremos más habitable el entorno. Por ejemplo, reduciendo su índice de radioactividad o la toxicidad de su agua. Además, podemos invertir los "puntos de viabilidad" obtenidos para abrir criocápsulas de otros colonos y obtener benificios de todo tipo, como mejores precios en las tiendas o más materiales. Esto último es importante, ya que la creación ha ganado mucho peso: aunque siguen existiendo las tiendas, también podemos crear armas, modificadores para las mismas o armaduras, siempre que tengamos los ingredientes necesarios. Así, tenemos mucha más flexibilidad para diseñar un personaje a nuestra medida, ya sea con tecnología ya conocida (el clásico rifle de asalto de la N7, la Black Widow o la Omnihoja estándar regresan, por ejemplo) o con equipamiento de las civilizaciones de Andrómeda. Un requisito crucial para todos estos objetivos
la idea DE Crear nuevos Mundos Es Clave En la Historia principal y En la propia jugabilidad DEL título