The Legend of Zelda breath of the Wild
Hacia rutas salvajes
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Christopher Mccandless era el típico joven americano de película: estudiante con calificaciones excelentes y capitán del equipo de la universidad. Pero, a pesar de tenerlo todo, Chris se sentía vacío. Tras graduarse, decidió dejar atrás su vida: donó sus ahorros y emprendió un viaje a través de Estados Unidos, subsistiendo únicamente con lo que la naturaleza le proporcionaba.
Tras el lanzamiento de Skyward Sword, en Nintendo se dieron cuenta de que algo fallaba; el juego fue mundialmente aclamado, pero la fórmula Zelda se había encorsetado, ofreciendo en cada entrega menos libertad. Como Christopher, Eiji Aonuma decidió abandonar la zona de confort y viajar hacia rutas salvajes.
La esencia de la aventura
El camino a seguir ya lo había marcado un joven Miyamoto hacía treinta años: vivir aventuras en un mundo que se puede recorrer en cualquier dirección, sentir que, a cada paso, es- tamos desvelando un secreto tiempo atrás olvidado, grandes retos cuya solución sólo está delimitada por nuestra imaginación... En esencia, Breath ofthewild y el primer Thelegend ofzelda de NES son el mismo juego, con treinta años de avances tecnológicos de por medio. Es el concepto de mundo abierto elevado al máximo exponente. ¿Ves ese lago a kilómetros de distancia? Puedes ir, zambullirte y atrapar peces. ¿Y ese amenazador pico en el horizonte? Puedes escalar hasta lo más alto y hundirte en la nieve que cubre la cima. Todo el terreno que forma parte de Hyrule puede ser alcanzado... de una forma o de otra. Este detalle es clave, pues dentro de toda su libertad, Breathofthewild presenta una serie de leyes físicas y naturales a las que debemos adaptarnos para sobrevivir. En una zona de temperaturas bajas, por ejemplo, Link perderá salud a causa del frío. Para combatirlo, en cualquier otro Zelda, la solución sería equipar una nueva túnica que encontraríamos en el interior de una mazmorra. En Breathof thewild, dicha túnica no es más que una pieza de equipo opcional (una de tantas) que es muy fácil pasar por alto. Y, aun así, daría igual, porque también podemos cocinar una receta con ingredientes picantes que aumente la resistencia al frío, o escalar la cara más escarpada de la montaña para no tener que atravesar la zona de bajas temperaturas. Y lo mejor es que nin-
ES UNA VUELTA A LAS raíces de La saga Zelda, A LA LIBERTAD de ACCIÓN Y A LA SENSACIÓN de DESCUBRIMIENTO
HC