Juegos que entran Por LOS oídos y ya no SALEN
Este mes, he tenido el placer de analizar Lifeisstrange:before thestorm. Días después de habérmelo acabado, he seguido dándole vueltas en mi cabeza, algo que me sucede con pocos títulos. La historia, que no voy a destripar, tiene la mitad de la culpa... pero la otra mitad es de la maravillosa música. Gracias a que la edición física del juego incluye un CD con la banda sonora (ya podrían animarse a ello más compañías, en lugar de darnos cajas casi huecas), no puedo parar de escuchar las canciones que suenan durante la aventura y seguir en Arcadia Bay sin necesidad de encender la consola.
Reconozco que no tengo un oído muy experto (no me pidáis diferenciar notas, tempos ni nada por el estilo), pero siempre he disfrutado mucho de aquellos juegos que hacen cosas diferentes en la parcela sonora o que emplean composiciones de ésas que no se olvidan. Particularmente, me pirran los juegos que echan mano de temas cantados, como es el caso de las dos entregas de Lifeisstrange. Lo usan menos sagas de las que me gustaría, pero el recurso de la voz me ha dado siempre grandes alegrías, a poco que esté integrado con sentido.
La música "no se juega", pero puede ser tan importante como los gráficos, la historia o hasta la jugabilidad. Muchos títulos no serían lo mismo sin ella. Como ejemplos del pasado, podría citar los dos Sonicadventure o Crazytaxi, con ese "All I Want" de Offspring. Más recientes, podría empezar por hablar de Mafiaiii, que te traslada a los años 60 integrando canciones de la época en la narrativa (como "Bad Moon Rising" o "Paint it Black"), o de Finalfantasyxv, cuyo capítulo final es desgarrador gracias a ese "Somnus" que lo preside. También sagas como Forzahorizon, Granturismo, FIFA o PES han sabido cautivarme, en este caso con sus gramolas prestadas, que me han puesto sobre la pista de artistas tan interesantes como Chvrches o Daiki Kasho y de infinidad de temazos sueltos. Abriendo aún más la perspectiva, otro factor que adoro de las bandas sonoras es su capacidad para hacerme viajar en el tiempo y en el espacio. Me sucede, por ejemplo, con las melodías de Streetsofrage, Therevenge ofshinobi (gracias por tanto, Yuzo Koshiro), Shenmue, Ocarina oftime (las de Breathofthe Wild no les llegan ni a la suela del zapato), Finalfantasyx, Metal Gearsolid2, Rogueleader... Mención especial merecen algunos temas que me retrotraen a las tardes en el salón recreativo, como el de Segarally 2, o incluso sonidos como el "reload" de Timecrisis2, el locutor de Virtua Striker anunciando las selecciones que jugaban, las voces que pronunciaban solemnemente los títulos de cada juego y el fatídico "game over"... Los videojuegos no sólo entran por los ojos y por las manos. También pueden ser música para los oídos y entra en ellos para ya nunca salir.
La música "no se juega", pero puede ser tan importante como los gráficos o la historia: muchos títulos no serían lo mismo sin ella