THE CREW 2
EN LA TIERRA DEL TÍO SAM (Y EN LAS AGUAS Y LOS CIELOS)
ps4 - xbox one - pc 29 de junio ivory tower (ubisoft)
este verano va a ser muy prolífico para el género de la velocidad, sobre todo junio, un mes en el que van a salir hasta cuatro títulos. Los va a haber de todas las formas y colores, y el más atractivo de todos seguramente sea Thecrew2, con el que el estudio francés Ivory Tower elevará a la enésima potencia la fórmula de mundo abierto que nos propuso hace ya tres años y medio.
Aquella primera entrega se apoyaba en una recreación a escala del territorio de Estados Unidos. La extensión del mapa era gigantesca, muy superior a la de cualquier otro juego de conducción. No obstante, de primeras, el control y el apartado técnico lo alejaron de la excelencia. Aun así, tuvo éxito, por lo que Ubisoft apostó fuerte por él y, en lo sucesivo, fueron llegando numerosas ampliaciones.
Para esta secuela, de la que aún se desconoce si exigirá conexión permanente a internet, se ha apostado otra vez por el mismo país, pero con una peculiaridad: ya no sólo habrá conducción por tierra con coches o motos, sino también por mar y ríos con lan-
chas y por el aire con avionetas. Así, podremos cambiar instantáneamente de unos medios a otros, y cada uno hará gala de una jugabilidad muy cuidada, condicionada por factores como el batir de las olas o la reducción de visibilidad que provoquen las nubes o la niebla. Nosotros encarnaremos a un piloto cuyo objetivo es convertirse en campeón de un país donde el motor es religión. Para ello, deberemos ganarnos el favor de cuatro grandes familias, dedicadas a las carreras callejeras, las carreras profesionales, el off-road y el freestyle, respectivamente. Por si las lanchas y las avionetas no fueran suficiente, los vehículos de tierra, de marcas reales, serán más variados. Por ejemplo, habrá turismos GT3, motos del Dakar, Harley-davidson...
El mapa se ha rediseñado y ampliado para la ocasión, con la inclusión del agua en el plano horizontal y la del aire en el plano vertical. Será una delicia sobrevolar el Empire State Building o el Golden Gate, así como navegar por el Misisipi o por el Hudson en busca de la Estatua de la Libertad.