AOC Q3279VWFD8
Tamaño y calidad de imagen, sin tener que arruinarse
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omprar una pantalla para jugar suele dejar muy pocas opciones: o compras una tele o un monitor. Estos últimos llevan ya cierto tiempo poniéndose las "pilas", ofreciendo tamaños, alternativas y precios que, hasta ahora, no estaban siendo cubiertos ni tan siquiera por los televisores.
Así pues, si buscas una pantalla para tu cuarto, o un monitor para el PC, no quieres una pantalla de más de 40 pulgadas y, sobre todo, no piensas dejarte una "pasta", la respuesta pasa por un monitor como este Q3279VWFD8 de AOC. Estamos hablando de un panel IPS de 31,5 pulgadas con resolución QHD (2560 x 1440 píxeles), un tiempo de respuesta de 5 ms, compatibilidad con Freesync (adiós parpadeos con tarjetas AMD) y una frecuencia de actualización de pantalla de 75 Hz. Un panel de 8 bits capaz de mostrar el 88% de la gama de color NTSC, con unos colores más vivos y brillantes. Son características que están algo lejos del tope de gama, pero, si quieres un monitor para jugar (no competir en esports, ni que el refresco sea de 240 Hz), es una opción más que interesante, y más viendo su tamaño y su precio.
Además, también va servido en cuanto a conectividad (desde los estándares actuales HDMI y DisplayPort a VGA o DVI, sin olvidar el puerto para auriculares). Se le puede reprochar que no tiene puertos USB, y que su diseño puede pecar de resultar algo simple y de tener marcos algo gruesos, pero por 249 euros... valoración Si buscas una pantalla "grande" para ver películas y jugar en tu cuarto, pero sin necesitar lo último (gráficos 4K, refresco de 240 Hz...), es una gran opción y, sobre todo, con un precio ajustado. Siempre puedes comprar una tele, pero probablemente será más cara... y más grande. HC