La montaña rusa de los dimes y diretes

Nos espera un año emocionante e interesante, que va a estar marcado por las informaciones (y desinformaciones) sobre la nueva generación de consolas. Escucharemos de todo, desde estimaciones de analistas a rumores y deseos convertidos en noticias. Muchas especulaciones y declaraciones aisladas o dejadas caer en un tuit, que no nos sacarán de dudas hasta la presentación en sociedad de las nuevas máquinas. Ya sabéis que hay rumores que dicen que PS5 se mostrará en febrero, mientras que otros nos emplazan al E3 para saber de la nueva Xbox (este año, Sony también se salta la feria angelina).

Este ruidoso desglose de datos inciertos ha comenzado con las exclusividades, con las dos compañías en liza anunciando estrategias contrapuestas. Mientras Microsoft habla de que no habrá exclusivas para Series X (que todos sus juegos saldrán también en Xbox One), Sony deja caer que su consola tendrá exclusivas de relumbrón. Son dos posturas aparentemente contradictorias, pero que suenan más a declaración de intenciones que a otra cosa… Seguramente, cuando se despeje el humo, veremos que todo va a ser más o menos como siempre, con muti-plaformas, lanzamientos intergeneracionales y algún que otro exclusivo de verdad (aunque tampoco espero muchos).

Estos momentos de incertidumbre parecen estar afectando también a los actores secundarios. Cinco de los juegos más esperados para este principio de año han sufrido retrasos: Cyberpunk2077 (que me lo llevaba oliendo desde hace unas semanas), Watch Dogslegion, final fantasy vii, marvel’s Avengers y The last of us: part eii. No digo que se hayan retrasado por aquello de nadar entre dos aguas para no ahogarse en ninguna, pero la verdad es que da que pensar. Sobre todo, los casos de Avengers y Cyberpunk... Como os decía al principio, nos espera un año interesante. Lo que no tengo tan claro es si todas las emociones nos van a sentar bien... Este 2020 va a ser una montaña rusa, y no siempre estaremos chillando de entusiasmo. A veces, nos va a dar más vértigo del que esperábamos...