MIS TERRORES FAVORITOS
Eat Lead: The Return of Matt Hazard
Antes de que Eden Hazard se hiciera famoso y copara la portada de FIFA20, un "familiar" suyo, éste de nombre Matt, protagonizó uno de los juegos más irreverentes y paródicos que un servidor recuerda.
Como shooter en tercera persona con coberturas, Eatlead era un juego corto y ramplón, tanto en lo jugable como en lo técnico, innegablemente, y eso hizo que la prensa lo machacara sin miramientos. Su valía no estaba ahí, sino en la crítica ácida y en los homenajes que hacía a distintos iconos y clichés del videojuego.
El subtítulo de Thereturnofmatt Hazard era ya una declaración de intenciones, pues, en realidad, no era secuela de ninguna obra previa. Era un juego dentro de otro juego, de modo que el protagonista era una vieja gloria de los 80 que volvía a la acción para, dentro de un mundo virtual, enfrentarse a su propio creador. Éste odiaba a Hazard porque sus difíciles juegos fueron los únicos que no consiguió terminarse cuando era niño.
El desarrollo estaba plagado de parodias y pullas: a los RPG japoneses, a la inutilidad de los tutoriales, al exotismo de algunos enemigos... Por ejemplo, había un fontanero bigotudo que recordaba, sospechosamente, a cierta mascota, enemigos pixelados igualitos a los de Doom o un jefe de melena plateada y con estadísticas roleras que bien podía pasar por Sephirot. Además, en el arsenal, se incluía una herramienta mortífera como ella sola: una pistola de agua...