EL PODER DE LOS EXOSOMAS
Procedentes del campo médico, estas diminutas vesículas extracelulares están revolucionando el campo de la estética por su capacidad para regenerar y mejorar el tejido cutáneo.
MENSAJEROS
Hace ya más de cinco décadas que la medicina conoce los exosomas, pero se consideraban un subproducto poco interesante de la actividad celular.Y es que no fue hasta hace unos diez años cuando la comunidad científica comenzó a estudiarlos en profundidad, descubriendo su rol fundamental en la comunicación intercelular. En estética, sus aplicaciones para la belleza son aún más recientes, pero han sido rápidas cuando se descubrió que los exosomas podían ser un portador natural de activos excelente, capaces de llegar a células o tejidos específicos.
BIOACTIVOS CLAVE
¿Qué son realmente los exosomas? Son vesículas extracelulares que las células liberan al entorno para comunicarse entre ellas. En su interior llevan proteínas, lípidos, ácidos nucleicos y factores de crecimiento entre otros, y cuando llegan a las células receptoras, desencadenan respuestas muy específicas.
Ese poder de transmisión, preciso y exacto, es lo que hace tan especial a los exosomas: en su interior se pueden albergar moléculas bioactivas clave. Péptidos, antioxidantes, factores de crecimiento… Y es que cada una de estas vesículas puede albergar un cóctel de materiales regenerativos esenciales, un kit de activos a la medida de las células que queremos regenerar. El beneficio es doble: por un lado, llega donde ha de llegar, y por otro, anima a los tejidos a mejorar todos sus procesos. Esa es una de las claves de su éxito: reactiva todas las zonas donde se apliquen, incluso en áreas difíciles de tratar, como las ojeras o el cuello, y se trata de una mejora global, pues aporta luminosidad, reduce manchas y el aspecto de los poros e hidrata. La piel actúa -y se vecomo si fuera más joven.
Los exosomas guardan en su interior bioactivos clave para regenerar las células a las que se dirigen, enviando mensajes para que se regeneren