Sarkozy dice que “jamás” cometió el “mínimo acto de corrupción”
El ex presidente francés declara en el juicio por las acusaciones de tráfico de influencias
Nicolas Sarkozy aseguró ayer que “nunca” ha cometido “el mínimo acto de corrupción” y, en el inicio de su interrogatorio en el proceso que lo juzga por corrupción y tráfico de inf luencias, aseguró que buscará “aclarar la verdad”.
“Nunca he cometido el mínimo acto de corrupción. Nunca he traficado una inf luencia, pretendida o real”, aseguró el ex presidente francés, que lamentó ser interrogado como un delincuente por un caso menor.
Criticó los medios colosales desplegados por la Fiscalía Nacional Financiera en la investigación y la acusó de haberle ocultado elementos de la pesquisa para dañar su derecho a la defensa. Sarkozy aseguró que se intervinieron más de 3.600 conversaciones suyas y consideró normal que en alguna haya algún detalle porque “todo el mundo cuando habla por teléfono puede decir algo que no es cierto”, pero subrayó que no demuestran “ni la más mínima huella de corrupción”.
A diferencia de su abogado Thierry Herzog, también imputado y que se negó a responder a preguntas sobre las conversaciones telefónicas intervenidas amparándose en el secreto profesional, Sarkozy señaló que no evitará ninguna cuestión. “El delito era tan grande, el delincuente tan importante, que había incluso que registrar el Supremo”, ironizó el conservador, que apuntó que no habría caso si no fuera porque él está implicado.
Sarkozy, de 65 años, se consideró víctima de un “ensañamiento” por las acusaciones, por las que se enfrenta a penas de hasta 10 años de cárcel y un millón de euros de multa. Está acusado de haber maniobrado en 2014 para promover a Gilbert Azibert a un puesto en el Consejo de Estado de Mónaco a cambio de que este magistrado, entonces en el Supremo, lo ayudara en la investigación del llamado caso Bettencourt.