El último desatino de Trump
El Congreso proclama el triunfo de Biden tras los graves incidentes del miércoles Los sucesos de EEUU, otra excusa para el rifirrafe político en España
Después de una de las jornadas más convulsas de la historia de Estados Unidos, el Congreso de este país ratificó ayer el resultado de las elecciones de noviembre, que dieron la victoria al demócrata Joe Biden. Donald Trump, aún presidente, se comprometió, finalmente, a favorecer una “transición ordenada” del poder. De este modo, el nuevo presidente jurará el cargo ante la Biblia y en las escalinatas del Capitolio el próximo 20 de enero.
Los presidentes del Senado y de la Cámara, el republicano Mike Pence y la demócrata Nancy Pelosi, cerraron de este modo un pleno que sufrió un ataque de partidarios de Trump, que hubo de suspenderse durante varias horas, que se reanudó y que ha dejado cuatro fallecidos.
Antes del asalto, Trump llamó a caminar hacia el Capitolio en un mitin que dio en la misma capital federal del país, para presionar a los congresistas que se proponían a certificar el resultado de las elecciones en lo que suele ser un mero acto protocolario. Trump intentó que varios republicanos impidiesen este refrendo en una jornada en que se conoció, además, que los demócratas lograban los dos senadores en liza de Georgia. Con este resultado, el partido del presidente Biden tiene la mayoría en las dos cámaras.
El Congreso que validó la victoria de Biden no era el mismo que se había reunido 14 horas antes para empezar a contar los votos electorales de cada Estado en los comicios de noviembre, como demostraron los destrozos en la sede de la Cámara de Representantes.
Después de casi cuatro horas de asalto de los seguidores de Trump, que marcharon hacia el Congreso incitados por el propio presidente saliente, los legisladores de ambos partidos consideraron importante retomar la misma noche del miércoles la sesión que interrumpió la inaudita insurrección en Washington.
“A quienes desataron el caos en nuestro Capitolio: ustedes no han ganado. La violencia nunca gana”, dijo el vicepresidente saliente de Estados Unidos, Mike Pence, cuando se reanudó la sesión conjunta de ambas cámaras, a última hora del miércoles. Fue Pence quien tuvo que ordenar a la Guardia Nacional el despliegue tras el asalto, ante la pasividad de Trump. Más de siete horas después, la sesión concluyó con Pence, que durante los últimos cuatro años ha sido el escudero fiel de l presidente, declarando la derrota de ambos en las elecciones , y la victoria de Biden y la vicepresidenta electa, Kamala Harris. Este anuncio (...) debe con
Pence, alejado de Trump, afirma en el Capitolio que “la violencia nunca gana”
siderarse una declaración suficiente de quiénes son las personas elegidas como presidente y vicepresidenta de Estados Unidos”, afirmó Pence.
Inmediatamente después, Trump distribuyó un comunicado en el que se comprometía a “una transición ordenada el 20 de enero”, cuando Biden llegará al poder, aunque volvió a mostrarse “totalmente en desacuerdo con el resultado de las elecciones”. “Siempre he dicho que continuaríamos nuestra lucha para asegurar que sólo se contaban los votos legales. Aunque esto representa el fin del mejor primer mandato en la historia presidencial, sólo es el comienzo de nuestra lucha para hacer a Estados Unidos grande de nuevo”, añadió, citando su lema electoral.
La declaración de Trump, publicada en Twitter por su asesor de comunicación Dan Scavino, ya que esta red social ha vetado al presidente, fue probablemente lo más cerca que estará el mandatario saliente de reconocer la derrota en las elecciones, algo que ha prometido a sus seguidores que “nunca” hará. Como Twiter, también Facebook e Instagram han impedido al presidente colocar sus mensajes.
La ratificación en el Congreso completó por fin un proceso electoral que comenzó el día de las elecciones y debía haber concluido cuando el Colegio Electoral –el órgano competente en este ámbito en EEUU– confirmó el triunfo de Biden, el pasado 14 de diciembre.