España e Italia dejan los deberes para el final
España e Italia no pasaron del empate inicial en un partido decepcionante en cuanto a ocasiones en el que, según pasaron los minutos, el equipo transalpino dio por bueno el empate que mantiene todas las opciones abiertas para la última jornada, con el combinado español liderando el Grupo B con cuatro puntos, y que se volvió demasiado duro en los últimos minutos con hasta tres expulsados.
España dominó claramente el balón con un 60% de posesión, pero la ocasión más clara llegó a la media hora de partido con un fuerte disparo de Frattesi que sacó Álvaro Fernández a córner en una gran estirada.
Oportunidad tras una pérdida en la salida de Hugo Guillamón, el punto débil que señaló Luis de la
Fuente tras la victoria frente a Eslovenia (0-3).
Más allá de un disparo lejano de Miranda que se fue rozando el travesaño, España no generó más peligro y sumó su octavo 0-0 consecutivo al descanso. Tiempo que aprovechó el seleccionador para sustituir a Guillamón por tener amarilla y afrontar continuamente un dos contra dos, junto a Cuenca, frente a Scamacca y Cutrone.
Diez minutos más tarde, de la Fuente repitió operación. Sacó del terreno de juego a Gonzalo Villar, el mejor contra Eslovenia, por estar amonestado, y metió en el campo a Moncayola, añadiendo trabajo defensivo al centro del campo y además aportó lo más peligroso de España hasta el minuto 62 con un disparo fuerte desde fuera del área.
La última media hora de partido transcurrió con más miedo que ganas de ganar. Sobre todo para Italia. Además, Scamacca fue expulsado por doble amarilla en cuatro minutos por sendos manotazos. Tras confirmarse su expulsión, hubo una tangana de la que salieron expulsados Óscar Mingueza, en su debut con España, y Rovella. Pero el marcador ya no se movería y todo queda abierto para la última jornada.