Irán culpa a Israel del sabotaje en la planta nuclear de Natanz
● Las autoridades persas anuncian venganza y advierten de que su programa seguirá su desarrollo
Las autoridades iraníes acusaron ayer a Israel del sabotaje en su planta de enriquecimiento de uranio de Natanz y advirtieron que continuarán desarrollando su programa nuclear y se vengarán en el momento adecuado.
El apagón sufrido la víspera en Natanz despertó inmediatamente las sospechas debido a que la instalación ya fue blanco de un incendio el pasado julio en una sala de montaje de centrifugadoras avanzadas, del que varias fuentes responsabilizaron a Tel Aviv.
“Los sionistas (israelíes) quieren vengarse de nuestros éxitos en el camino de la eliminación de las crueles sanciones, pero nosotros no lo permitiremos y nos vengaremos”, subrayó ante el Parlamento el jefe de la diplomacia iraní, Mohamad Yavad Zarif.
Según Irán, este sabotaje busca por un lado detener el progreso del programa nuclear persa y, por otro, descarrilar las actuales negociaciones para salvar el acuerdo nuclear firmado en 2015 entre Irán y seis grandes potencias, del que EEUU se retiró en 2018.
“Natanz será construida más fuerte que nunca con máquinas más avanzadas y, si creen que nuestra mano en las negociaciones se ha debilitado, este acto vil fortalecerá nuestra posición en las mismas”, advirtió Zarif.
El incidente de Natanz se produce pocos días después de que se reunieran en Viena representantes de Irán y del resto de países signatarios del pacto nuclear (Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania).
En estas conversaciones, que continuarán la próxima semana para eliminar las sanciones estadounidenses y lograr que Irán vuelva a cumplir con todos sus compromisos, participa por primera vez desde su retirada EEUU, aunque de forma indirecta.
Israel es un firme detractor del acuerdo nuclear y, según la televisión israelí, el apagón en Natanz se debió a un ciberataque ejecutado por el servicio secreto Mosad, aunque por ahora no ha habido una asunción oficial de la autoría.
El primer ministro en funciones israelí, Benjamin Netanyahu, dijo ayer que su país nunca permitirá “que Irán obtenga armas nucleares” y continuará “defendiéndose de las agresiones y el terrorismo iraní”.
Por su parte, la Comisión Europea pidió que se aclare “qué ha pasado y quién está detrás” de lo ocurrido en Natanz, al tiempo que indicó que el incidente “podría haber sido un acto de sabotaje”.
Netanyahu afirma que su país nunca permitirá que Teherán “obtenga armas atómicas”