La Policía Nacional desarticula una banda que robaba coches de alta gama
Los dos primeros vehículos sustraídos en Portugal se han intervenido en Huelva y Sevilla Hay cuatro detenidos en Granada
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado en Granada, Madrid y Málaga un grupo criminal dedicado, presuntamente, al robo de turismos de alta gama en Portugal para su posterior venta en España, donde eran matriculados con documentación falsa para hacerlos pasar como vehículos importados.
Cuatro personas han sido detenidas en Granada como encargadas de su recepción y matriculación y se han recuperado cuatro vehículos durante la operación, uno de ellos en Huelva.
Las investigaciones comenzaron tras recibirse una comunicación de Sirene que avisaba de la posible matriculación fraudulenta en España de un vehículo de alta gama procedente del país luso.
Gracias a los órganos de coordinación policiales, se tuvo conocimiento de que la Polícia Judiciária de Vila Real, en Portugal, estaba llevando a cabo una investigación sobre un grupo criminal de carácter internacional dedicado a la falsificación, estafa y robo de vehículos.
El continuo intercambio de información entre ambos cuerpos permitió averiguar que podrían encontrarse en España otros tres vehículos de alta gama sustraídos en el país luso.
Posteriormente, las gestiones policiales llevaron a la intervención de los dos primeros vehículos en Sevilla y en Huelva.
Seguidamente, se obtuvo el expediente de matriculación del primer coche investigado, presentado en la Jefatura Provincial de Tráfico de Granada con documentación falsa, entre la que destacaba una factura italiana falsificada.
Igualmente, se pudo conocer que el grupo criminal disponía de dos conocidos concesionarios de lujo en Málaga y en la localidad madrileña de Móstoles, donde procedieron a la venta de dos de los turismos que habían sido matriculados en España con facturas falsas.
Tras identificar plenamente a las personas que habían participado en los hechos, se procedió a la detención de cuatro integrantes del grupo criminal, quienes tenían su residencia en Granada. Dos de ellos eran los administradores de los concesionarios de compraventa de automóviles, mientras que los otros dos eran los falsificadores de la documentación.