El coronavirus obliga a suspender los Sanfermines por segundo año
El alcalde de Pamplona, Enrique Maya, anunció ayer con “pesar” que se ha visto “obligado” a la suspensión de los Sanfermines 2021 por segundo año consecutivo debido a la situación sanitaria generada por el Covid-19.
La decisión fue comunicada en una rueda de prensa por el alcalde, tras reunirse con la Junta de portavoces y trasladarlo a la Mesa de los Sanfermines, foros en los que dijo haber sumado el “consenso”, y a los que señaló que 1,3 de los 2,4 millones de euros destinados inicialmente a las fiestas se van a derivar a costear un “amplio y ambicioso programa” cultural y de actividades de “ocio seguro”.
Acompañado de buena parte de su equipo de Gobierno, Maya reconoció que la suspensión no sorprenderá a muchas personas, dada la deriva de la pandemia en Navarra, cuyos desfavorables datos fueron puestos de manifiesto el pasado jueves a alcaldes representantes de la Federación Navarra de Municipios y Concejos por los consejeros de Interior y de Salud, Javier Remírez y Santos Induráin.
Allí se les trasladó “la no conveniencia de celebrar fiestas patronales en Navarra”, recordó, con base en datos de que ese día “Navarra era una de las comunidades españolas con mayor incidencia de casos Covid”, pese a una ligera mejoría en estos últimos días, y la situación de alerta 4 en la comunidad foral, lo que “supone un riesgo realmente alto”.
A su vez, el ritmo de vacunación es más lento de lo previsto”, y Navarra se mantiene “alejada” de la deseada inmunidad de rebaño, también previsiblemente en las fechas de las fiestas de San Fermín.