EN MI OPINIÓN
Los consejos y novedades de nuestra directora
Diseño eco
Una de las tendencias con mayor proyección del momento es el diseño biofílico, o la necesidad de eliminar fronteras entre interior y exterior, una propuesta que responde a la voluntad imperiosa de amar y respetar nuestro entorno natural. Una buena forma es introducir plantas o elementos de inspiración natural en casa. Arriba, macetero con autorriego (reciclado y reciclable), de CitySens (119e). Abajo, de La Redoute: estanterías, muebles y cestos para plantas (CPV). A su lado, cañas biodegradables (8e/caja de 114 u), de Kikkerland, en +D2.
Al natural
Los tonos naturales son un buen complemento para la decoración de esta temporada, especialmente en exteriores, para integrarlos en el paisaje. Arriba: mantel individual que lleva por nombre Merluza (unos 10e), de El Corte Inglés.
En el centro, mesa de comedor de madera de abeto (180 x 90 x 76 cm; unos 400e), de Decowood.
Abajo, mesa de centro Arizona, de Joana Santos Barbosa para
InsidherLand (unos 4.573e).
Biombos: piezas escogidas
Separar sin obstaculizar. Ver y ser visto. Ocultarse y lograr intimidad. Los biombos son capaces de lograrlo todo. Estas bellas piezas se erigen como elementos divisores de espacio, replegables, capaces de integrarse en cualquier ambiente, aportando una solución integral a nivel de funcionalidad, resultando muy decorativa. Ya sean de rejila y en acabado natural, revestidos con materiales ‘high tech’ o en una delicada tela tapicera, las nuevas propuestas en materia de biombos reversionan su espíritu para mostrarnos cómo compartimentar el espacio a nuestro antojo, en casa y en la oficina sin restarle un ápice de elegancia. Más incluso: potenciando su belleza. Te mostramos dos buenas soluciones: a la izquierda, un diseño de Decowood que apuesta por recuperar la estética de antaño con una clásica y actual rejilla (135 x 180 cm; unos 170e). Abajo, un diseño tapizado, versátil y combinable entre sí (en varias medidas; desde 385e). De Woud.
Motivos y colores
Que la geometría es una apuesta que siempre funciona es algo que nos queda más y más claro. De las propuestas en suelos desde tiempos inmemoriables recuperamos motivos y diseños de marcado carácter: desde las celdas de abeja a los dibujos técnicos, pasando por las simples y elegantes rallas. Lo geométrico nos gusta; más aún si se aplica al papel pintado o a los textiles: por un lado (arriba), los colores cada vez más profundos y llamativos se dejan seducir por motivos de limpias geometrías y repetidos diseños. Es el caso de estos dos modelos: en azul, Gofrado Mai, de la colección Japón (129e), de Gastón y Daniela. A su derecha, Raches, un textil ideal para revestimientos murales (ancho de la tela: 282 cm; algodón y poliéster; unos 117e), de la colección Ikaria, de Alhambra.