CAMINOS QUE CONDUCEN AL FUTURO
El Design Manager Exterior de Polestar, Nahum Escobedo, nos presenta Polestar 3, su primer SUV eléctrico, con el que la firma sueca pretende redefinir la tipología a base de diseño, innovación, disfrute en la experiencia de conducción y alto rendimiento
Nahum Escobedo (Zacatecas, México, 1977) se enamoró de los coches cuando tenía apenas siete años. Lo recuerda muy bien. Tanto que, al contarlo en un céntrico hotel madrileño, entrecierra los ojos y parece que estuviera reviviendo el momento: andaba por una calle de su ciudad cuando el potente rugido de un motor exigió súbitamente su atención. El coche, un Corvette Sting Ray 1967, rodó despacio a su lado, permitiéndole fijarse en su característica trasera con la luna en forma de ‘u’ invertida y cuatro pequeños faros redondos. Décadas después, sonríe y recupera su pensamiento infantil: “¿De dónde habrá venido esta nave espacial?”. Aquella impresión marcaría un antes y un después para un niño curioso al que le gustaba dibujar, pero ¿y el diseño? ¿Cuándo entró en su vida?
Pero no nos adelantemos, primero debemos acompañar al joven Nahum y su familia a los Estados Unidos, donde se trasladaron cuando él acababa de inaugurar la adolescencia. Allí, sus dotes para el dibujo le llevarían a probar con la arquitectura y la animación, primeros pasos que necesitaban aún de un encuentro decisivo. Trabajaba para la compañía de transporte logístico UPS en California cuando un colega le pidió que le acompañase a la escuela donde estudiaba, el Art Center College of Design de Pasadena. “Cuando llegamos y vi la escuela, supe de inmediato que ése era mi futuro. Hay una galería donde se muestran proyectos de los alumnos, y, viendo bocetos de coches expuestos allí, uní mis dos pasiones en una vocación”. Se licenció en Diseño automotriz en 2011, para incorporarse inmediatamente al Grupo Volkswagen, y después trabajó en el departamento de diseño de Honda. En 2016, pasó a Volvo, donde se sumó a un proyecto que le llevaría de California (Estados Unidos) a Gotenburgo (Suecia), ciudad en la que hoy reside. “Y, aunque no fui oficialmente empleado de Polestar hasta 2021, como la compañía perteneció a Volvo unos años, he trabajado en todos sus modelos desde el comienzo”.
Hablar de Polestar obliga a hablar de la tradición del diseño escandinavo. Es decir, de atractivas formas orgánicas, elegantes
y muy sofisticadas pero siempre discretas; de una funcionalidad que reina sobre cualquier otro objetivo; de su esencial dimensión emocional, expresada a través de líneas, colores y texturas tan armónicas y atractivas como simples, equilibradas y calmas… Y basta señalar que los coches de Polestar no llevan marca ni modelo, una decisión tomada para subrayar lo más importante, su diseño, para darse cuenta de que no puede entenderse la marca sin comprender su profundo vínculo con dicha tradición. Escobedo, Design Manager Exterior de Polestar, resume el compromiso entre ambas señalando los valores comunes sobre los que se construye: “La simplicidad está de forma natural en todo lo que hacemos; como el diseño, que es el motor que nos mueve. Y completan los valores esenciales de la marca, la performance, o alto rendimiento, y la innovación, desarrollada en dos direcciones, una tecnológica y otra de sostenibilidad”.
Pero lo que nos reúne en Madrid con el diseñador a la vuelta de las vacaciones veraniegas es la presentación en nuestro país del flamante Polestar 3, un potente SUV eléctrico, en el no menos novedoso space que la marca inauguró en pleno barrio de Salamanca para la ocasión. “Tiene una arquitectura completamente nueva –nos cuenta en primicia Escobedo–: cuando pensamos en el típico SUV, imaginamos un coche alto y muy grande. Pero en Polestar hacemos todo de forma distinta a los demás, y por eso, con el Polestar 3, hemos tratado de redefinir la tipología del SUV de alta gama. En él, el tamaño o la altura no son tan importantes como la experiencia de conducción, motivo por el que le hemos dado un toque deportivo. ¿Cómo? Bajando el techo; suavizando sus curvas, como en el frente, redondeado y muy aerodinámico; colocando la batería entre las ruedas, lo que nos ha permitido retrasar el asiento trasero y ganar espacio –y comodidad– en los delanteros… Escapando a todos los clichés, vaya”. También el de que los coches se compran en un concesionario, ya que, siguiendo la estrategia Polestar de negocio ‘fígital’ –acrónimo que funde ‘físico’ y ‘digital’ para explicar su combinación de espacios experienciales físicos y venta online–, para adquirir su primer SUV eléctrico no hace falta más que un clic. www.polestar.com
“EN POLESTAR HACEMOS TODO DE FORMA DISTINTA A LOS DEMÁS, Y POR ESO, CON POLESTAR 3, HEMOS TRATADO DE REDEFINIR LA TIPOLOGÍA DEL SUV DE ALTA GAMA”