Warren inclusivo
WarrenWarren Sánchez, el hombre que tiene todas las respuestas, también es capaz de todas las palabras a la hora de la propaganda. Desplegó una vez más su destreza, a cuatro manos, en un artículo en «El País» escrito con Ángel Gurría, que lidera una burocracia llamada la OCDE, a menudo catalogada de liberal, como el FMI, el G20 o el Banco Mundial, cuando está muy lejos de serlo. Lo probó nuevamente dicho empalagoso artículo, que repite los adjetivos de moda en la corrección política, en pro de un mundo fuerte, resiliente, ecológico y, naturalmente, inclusivo. Pero el lector atento observará que, como siempre, todo gira en torno a la imprescindible necesidad de que el poder político sea aún mas poderoso, excluyendo los bienes, derechos y libertades de los ciudadanos.
Para comprobarlo, veamos qué acuciantes asuntos desvelan a este par de ilustres personajes: «el cambio climático y la pérdida de biodiversidad, las crecientes desigualdades y la concentración de riqueza, la digitalización o el futuro del trabajo». En cuanto a las vacunas: «deben producirse a escala, distribuirse equitativamente en todo el mundo y ser asequibles para todos. Garantizar que todas las personas puedan ser inmunizadas a la vez es un imperativo humanitario y una condición previa para garantizar la salud y la prosperidad».
¿Usted cree que todo esto apunta a un menor peso de la política en beneficio de la sociedad civil? No lo parece.
Es verdad que hablan de «comercio libre», libre», pero inmediatamente añaden: «justo e inclusivo como motor del crecimiento y la prosperidad, al tiempo que fortalecemos la resiliencia de las cadenas de valor mundiales y las condiciones equitativas». Vamos, que libre, de aquella manera.
Y continúan: «La crisis de la covid-19 ha aumentado las desigualdades, al tiempo que nos siguen acechando el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y otras emergencias ambientales… fomentar un modelo de crecimiento económico y de productividad basado en salarios justos, condiciones de trabajo decentes y un diálogo social mejorado».
Vaya, vaya, lo de la libertad de la gente se les ha escapado. Y cuando Warren y Gurría hablan de impuestos aluden a «desafíos fiscales derivados de la creciente digitalización de la economía mundial» y de «promover la transparencia fiscal». No parecen estos prohombres tan inclusivos muy dispuestos a incluirla a usted, señora, en ninguna bajada de impuestos. ¿Verdad que no?