...con un final dramático
Sergi Mingote, una leyenda del alpinismo español, falleció en el descenso
La histórica ascensión al K-2 no tuvo un final feliz. El alpinista español Sergi Mingote (1971, Parets del Vallés) falleció mientras descendía desde el campo 3 hasta el campo avanzado a poco más de 6.000 metros de altura. Sergi estaba al margen de los cánones del alpinismo actual, que se ha convertido poco menos que en pura competición. Rechazaba el oxígeno artificial y aborrecía la masificación de las montañas. Antes de emprender la última expedición de su vida aseguraba que «quería hacer las paces» con el K2 y «reencontrase con una montaña» con la que tenía «una relación de amor-odio». La coronó por primera primera vez el 23 de junio de 2018 y ya entonces vivió una situación dramática. «Creí que no bajaba», afirmó. El K2 fue el segundo ochomil en su reto 14x1000 0 OXYGEN, con el que pretendía alcanzar la cima de los 14 ochomiles sin oxígeno artificial embotellado en un período de unos 1.000 días y así superar el récord del coreano Kim Changho, quien en 2013 dejó la marca en 7 años, 10 meses y 6 días. Mingote ya había coronado el K2, el Broad Peak, el Manaslu, el Lhotse, el Nanga Parbat, el Gasherbrum y el Dhaulagiri. El Cho Oyu, el Shisha Pangma y el Everest ya los había coronado antes. La pandemia le frenó, pero se marcó un nuevo reto, la «Olympic Route». Fue una travesía por Europa de 7.068 kilómetros que combinó el montañismo y el ciclismo y que completó en 48 días.
Mingote compaginó su faceta aventurera con la alcaldía de Parets del Vallès en las filas del PSC entre 2011 y 2018. Su fallecimiento ha causado una gran conmoción en el alpinismo español, el deporte en general, el PSOE e incluso en el Gobierno. «Sergi Mingote quería seguir haciendo historia», tuiteó Pedro Sánchez.