El farero
¿Todavía sigues pensando en cómo era tu vida antes de la Covid-19? ¿Harto de no ver a tu familia? ¿Cansado de llevar mascarilla y limpiarte las manos con gel hidroalcohólico a todas horas? ¿Contando los días para recibir la vacuna? ¿Hastiado de hacer malabares con los codos para abrir las puertas y llamar al ascensor? ¿Aún no sabes adónde te está permitido salir y a quién ver? ¿Miedo al futuro?
¿Pavor al cambio climático y a los efectos como Filomena y Gaetán? ¿Incertidumbre con tu futuro profesional y económico? ¡Deja de preocuparte y mira la luz potente del faro de la resurrección, que acaba de encender el farero Sánchez, y todos tus problemas y peores pesadillas dejarán de existir!
¿Cómo es posible que el presidente de un país, que ha dejado de lado al sector turístico, el cual aportaba el 12,5% al Producto Interior Bruto (PIB) nacional y ha retrocedido a niveles de 1995 con unas pérdidas de más de 100.000 millones de euros, que ha mentido con las ayudas que no pidió a Bruselas, venga a decir ahora, ante la Organización Mundial del Turismo (OMT), que «España va a ser el faro de la resurrección del turismo»? ¿El farero del faro va a ser Pedro Sánchez? Si es que cuando lo ves y lo oyes te parece un anuncio malo de teletienda, te quedas hipnotizado pero no lo compras.
¿De verdad se creen que para volver a ser el segundo país elegido en el mundo por los turistas, con decir que vamos a ser el faro de la resurrección es suficiente? ¿Hay algún plan del Gobierno (dentro y fuera) para fomentar el turismo? ¿Eso es todo?, ¿vamos a ser el faro y Pedro Sánchez el farero? A un hipócrita se le distingue porque cuando habla miente, cuando promete no cumple y cuando confías en él te traiciona.