MADURO TIENE UNA SOLUCIÓN PARA LA COVID
NicolásNicolás Maduro nunca deja de sorprender a propios y extraños con sus mensajes, siempre fiel al estilo «Aló Presidente». Cuando no es la voz de un pajarito que le trae mensajes del bienestar de Hugo Chávez en el más allá, es el propio Chávez transfigurado en pajarito quien le habla, lo que deja de ser un aspecto muy pegado al realismo mágico de Rulfo. La última entrega de este folletín nos la presentó ayer el que actualmente ostenta el poder en Venezuela recurriendo en esta ocasión a la literatura universal de Cervantes y, cual Don Quijote, presentó su «bálsamo de Fierabrás» como si de una novela de caballerías medieval se tratase, y así contó que cual Oliveros, cualquiera que beba del mágico bálsamo, sanará de sus heridas: «Habiendo recibido el permiso sanitario oficial del país, puedo presentar la medicina que neutraliza el 100 % del coronavirus, el Carvativir, mejor conocido como las gotitas milagrosas de José
Gregorio Hernández», dijo, mostrando el frasquito ante las cámaras, transfigurado esta vez él mismo en buhonero, momento que refleja la fotografía. No sabemos cuántos venezolanos, agolpados ante su carromato, le darán sus dólares o sus gallinas a cambio de uno de esos frasquitos maravillosos que «todo lo curan» y que tiene el aval de haber sido probado durante los últimos nueve meses con «experimentos masivos» en pacientes enfermos de coronavirus «dando buenos resultados. Es un poderoso antiviral de Venezuela. Aquí pensamos en la humanidad», afirmaba Maduro desde lo alto. Venezuela está viendo aumentar los contagios de forma sostenida, y esto no es literatura por entregas.