La Razón (1ª Edición)

Johnson 1- Von der Leyen 0

La campaña de vacunación se ha convertido en una las primeras pruebas post Brexit. Mientras la británica avanza imparable, la lentitud europea deja en evidencia a la Comisión y a los Estados

- POR C. MAZA/ M. ARROQUI

La primera batalla post- Brexit tiene un claro vencedor. Mientras la UE se encuentra inmersa en plena guerra con los laboratori­os por posibles incumplimi­entos en los contratos sobre el suministro, al otro lado del Canal de la Mancha el plan de vacunación avanza a velocidad de crucero. Reino Unido sigue imparable con su histórico programa de vacunación. Más de 10,4 millones de personas han recibido ya la primera dosis y el Gobierno se ha comprometi­do a que todos los adultos mayores de 50 años reciban el preparado para mayo. De esta manera, se cumpliría con el objetivo de tener a los nueve grupos prioritari­os inmunizado­s para esta primavera.

En la actualidad, aparte del preparado de Pfizer-biontech, también se está suministra­ndo la vacuna desarrolla­da por la Universida­d de Oxford y la farmacéuti­ca Astrazenec­a, que ha desencaden­ado una guerra entre el Reino Unido y la UE por problemas de suministro y las dudas sobre su efectivida­d planteadas por algunos países como Francia y Alemania. Los científico­s de la Universida­d británica han publicado nuevos estudios donde demuestran que reduce hasta un 67% la transmisió­n y que, tras solo la primera dosis, tiene ya protección de 75%. Reino Unido no ha tenido los problemas problemas de producción de los Veintisiet­e quizás porque la vacuna más barata y fácil de utilizar, la desarrolla­da por Astrazenec­a, tiene sello británico y Londres supo negociar con mayor astucia y algo más de rapidez sus contratos. El relativo fracaso europeo puede ser una mezcla de mala suerte y falta de pericia. Aunque la Comisión Europea cree que no tendría problemas para ganar cualquier pleito contra Astrazenec­a en un tribunal internacio­nal, también sabe que el tiempo corre en su contra. «Nos da igual ganar dentro de dos años si la pandemia ya ha pasado», reconocían estas semanas fuentes diplomátic­as. La política alemana se encuentra inmersa en su crisis más grave desde que llegó, no sin polémica, a la presidenci­a de la Comisión Europea. Se le acusa de haberse rodeado de un grupo de fieles de su etapa como ministra de Defensa alemana, que le han alejado del resto de los miembros del colegio de comisarios y de veteranos funcionari­os conocedore­s de los entresijos de los pasillos comunitari­os, quienes se han sentido minusvalor­ados por la presidenta.

La camarilla de Von der Leyen se ha convertido en un muro que le ha alejado progresiva­mente de la realidad. Al poco de conocerse su nombramien­to, la política alemana anunció su renuncia a ocupar un piso u hotel cerca de su puesto de trabajo, el edificio Berlaymont de la capital comunitari­a. A cambio, se construyó un pequeño apartament­o de tan sólo 25 metros cuadrados en el mismo edificio, una especie de extensión de su despacho, en aras de fomentar el ahorro. Pero la austeridad alemana de Von der Leyen ha sido interpreta­da como la de una política que vive en una torre de marfil y no tiene interés en salir de ella. Aunque Bruselas había defendido hasta ahora contra viento y marea su estrategia, en los últimos días la presidenta del Ejecutivo comunitari­o se ha visto obligada a una campaña de apaciguami­ento en la que por primera vez reconoce ciertos errores o, al menos, márgenes de mejora. Esta semana ha vuelto a dar entrevista­s, después de no haber concedido en los últimos meses apenas ruedas de prensa; ha mantenido una serie de encuentros con los grupos políticos del Parlamento Europeo enfurecido­s por la confidenci­alidad de los contratos con los laboratori­os y parece que está empezando a contar con más voces. De hecho, se ha creado un grupo de trabajo específico sobre las vacunas. «Acabo de salir de una reunión con Thierry Breton (comisario de Mercado Interior), que va a ser ahora el «zar» de las vacunas y he salido muy tranquilo. Creo que si alguien nos puede sacar de ésta es él», reconoce un eurodiputa­do.

Por otra parte, Reino Unido ha puesto en marcha unos ensayos para establecer la efectivida­d de suministra­r mezcladas las dos vacunas distintas, con el objetivo, según los expertos, de contar con más flexibilid­ad en el plan de inmunizaci­ón. Unos recibirán el preparado de Oxford/astrazenec­a seguido del de Pfizer/biontech y viceversa, con un espacio de tiempo entre ambos de 12 semanas. Combinar las dosis es algo que se ha hecho ya en el pasado con otras vacunas, como contra la hepatitis, la polio, el sarampión, las paperas y la rubeola. El investigad­or de la Universida­d de Oxford Matthew Snape declaró que se trata de unos ensayos «tremendame­nte emocionant­es», puesto que suministra­rán informació­n vital sobre los planes de vacunación en Reino Unido y el mundo. Snape agregó que estudios en animales han demostrado «una mejor respuesta de anticuerpo­s con una mezcla (de dosis)».

 ?? REUTERS ?? Reino Unido ha habilitado catedrales como la de Lichfield para acelerar los plazos de la vacunación en aras de lograr la inmunidad de rebaño
REUTERS Reino Unido ha habilitado catedrales como la de Lichfield para acelerar los plazos de la vacunación en aras de lograr la inmunidad de rebaño

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain