DEL CARBÓN AL HIDRÓGENO. EL PLAN PARA LIMPIAR EL MIX ELÉCTRICO
La descarbonización es ya un proceso imparable para grandes productores como Endesa. La firma está transformando sus históricas centrales térmicas en parques renovables y fábricas de hidrógeno verde
ElEl hidrógeno renovable está llamado a ser un vector energético clave para el éxito de la descarbonización del sector energético. En particular, jugará un papel fundamental en aquellas áreas en las que la electrificación no sea la solución más eficiente o ésta no sea técnicamente posible en el medio plazo. Asimismo, el hidrógeno renovable producido mediante electrólisis contribuirá a la correcta regulación de un sistema eléctrico 100% renovable, aportando una mayor flexibilidad y mejorando la seguridad de suministro. Sin embargo, la producción y consumo de dicho hidrógeno renovable es aún incipiente. En la actualidad tan solo se producen y consumen en España en torno a 500.000 toneladas de hidrógeno como materia prima, en su práctica totalidad a partir de combustibles fósiles.
En el contexto previsto de reducción del coste de generación renovable, incremento de los precios del CO2 y de necesidad de almacenamiento de energía estacional, las tecnologías de producción hidrógeno renovable podrían empezar a ser competitivas en usos industriales en los próximos años. En todo caso, en el momento actual continúan siendo necesarios mecanismos de apoyo para hacer competitivo el uso del H2 frente a otras alternativas.
Endesa ha querido sumarse al reto del hidrógeno con el desarrollo de 23 proyectos nuevos en línea con la consecución de los objetivos marcados para la primera fase (2020-2024) de la Hoja de Ruta del Hidrógeno, lanzada por el Gobierno central. «Todos los proyectos de producción de hidrógeno contemplan la inversión en parques de generación renovable dedicados a la alimentación de los electrolizadores. Aunque no en exclusiva ya que también tienen la opción de verter los excedentes de electricidad generada a la red», cuentan los portavoces de Endesa.
Estos 23 proyectos de H2 renovable supondrán una inversión asociada de más de 2.900 millones de euros y se dividen en 340 MW de nueva potencia en electrolizadores, alimentados con 2.000 MW de energía renovable. Estos se dividen a su vez en proyectos peninsulares de electrolización (As Pontes, Huelva, Teruel, Almería, Tarragona, Valle del Ebro, Compostilla y Seseña), que contemplan una inversión agregada de 2.000 millones para la construcción de ocho electrolizadores con una capacidad de 315 MW. Hay que aclarar que algunas de estas centrales darán el paso de la generación con carbón a la generación con hidrógeno. Por otro lado, también conviene recordar que dentro de los electrolizadores es donde se produce el H2 como consecuencia de la separación de las moléculas de oxígeno e hidrógeno contenidos en el agua al aplicar una corriente eléctrica. De ahí los parques renovables asociados que Endesa planea construir.
Empleo
Además, se generarán 620 empleos durante su construcción y 320 empleos en la fase posterior de operación y mantenimiento durante los siguientes 20 años. A ello se sumará el empleo relacionado con la puesta en marcha de la generación renovable que alimentará los electrolizadores.
Por otro lado, los proyectos extrapeninsulares absorben otros 900 millones de inversión, se plantean opciones que van desde la producción de hidrógeno verde en plantas de generación (Barranco de Tirajana, Granadilla y Alcudia, con electrolizadores que sumarán 25 MW), el paso de plantas operativas a su funcionamiento con bi-combustible, y la sustitución de potencia de otras plantas operativas por hidrógeno/gas. «Endesa quiere poner de manifiesto su clara apuesta por el hidrógeno verde como clave en el proceso de transición energética y la descarbonización de la economía. Se trata de objetivos en los que venimos trabajando desde hace años y que han marcado nuestra estrategia de progresiva sustitución de generación
La firma tiene preparados 23 proyectos de H2 y la instalación de 2.000 MW renovables. La inversión total ascenderá a 2.900 millones de euros y generará cientos de empleos
térmica por generación renovable», destaca el director general de Generación de Endesa, Rafael González.
El proyecto más avanzado, hasta la fecha, es el desarrollado en As Pontes (A Coruña). El proyecto contará con un electrolizador de 100 MW y seis parques eólicos asociados, con una potencia conjunta de 611 MW, cuya construcción conllevaría la creación de unos 1.600 empleos durante los 18 meses de construcción. La construcción del electrolizador, que se prolongaría durante unos 24 meses desde su inicio, daría empleo a unas 120 personas. Su operación y mantenimiento, durante unos 20 años, precisaría del trabajo de unas 100 personas.
Por otro lado, la inversión total del proyecto alcanzará los 738,2 millones de euros y el funcionamiento del complejo, que tendría una producción de 10.000 toneladas de hidrógeno verde, daría empleo a unos 130 profesionales en las labores de operación y mantenimiento (100 en el electrolizador y otros 30 en los parques eólicos asociados ).
Adiós al carbón
Hay que destacar que el objetivo de este primer proyecto es mostrar que una instalación de este tamaño puede construirse, operarse y mantenerse tanto desde el punto de vista económico como técnico y medioambiental. El resto de propuestas peninsulares se desarrollará en Huelva, Teruel, Almería, Tarragona, el Valle del Ebro (Hidrógeno del Cierzo), Compostilla (León) y Seseña (Toledo). Todas juntas supondrán una potencia asociada en electrolizadores de 215 MW, la creación de más de 500 empleos en su fase de construcción y alrededor de 220 más en las fases posteriores de operación y mantenimiento.
Mientras arrancan estos primeros proyectos en hidrógeno renovable libre de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), Endesa ya ha iniciado el desmantelamiento de sus históricas centrales de carbón. Estos días iniciaban las operaciones en su central térmica de Andorra. El proceso de desmontaje creará unos 75 empleos este trimestre a los que se sumarán otros 100 el próximo. El tiempo estimado para el completo desmontaje asciende a seis años, durante los cuales también se llevarán a cabo las obras necesarias de restauración de suelos y regeneración de todo el entorno.
Lo primero que se hará es demoler el parque de carbones, que será sustituido por un parque solar fotovoltaico de 50MW. Se trata de la primera instalación que la eléctrica quiere montar en esa zona y que al final ascenderá a 1.585 MW fotovoltaicos y 140 de energía eólica. Además se construirá una planta de producción de hidrógeno renovable con capacidad para 60 MW.
La central lleva parada más de medio año y es un ejemplo de reconversión del tejido productivo y de la llamada transición justa. Y es que en este periodo se han impartido dos cursos de formación de las técnicas requeridas en estas obras.