Buena acogida a la supresión del impuesto de Sucesiones
La patronal y la Empresa Familiar destacan que la medida «contribuirá a reactivar la economía» así como a «evitar la fuga de sociedades» de Castilla y León
El anuncio de la supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones no ha dejado indiferente a nadie. La medida anunciada por el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco; y del consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, ha sido recibido con buen agrado.
Así lo demuestran las opiniones de la CEOE y de Empresa Familiar. La patronal agradece al Gobierno regional y a su presidente esa supresión, «tan demandada, más en un momento de ciclo económico en fase de desaceleración, puesto que favorecerá a toda la sociedad y, especialmente, contribuirá a reactivar la economía, potenciando la inversión empresarial, y, por tanto, la creación de empleo».
Además asegura que «es una realidad que un sistema impositivo favorable ayuda a la creación de riqueza, de empleo y, en consecuencia, a la generación de mayores ingresos públicos».
CEOE Castilla y León indica que la crisis del coronavirus ha puesto en evidencia que estos retos no son ya operativos; porque «lo que eran objetivos en el medio o largo plazo, son ahora una prioridad y una urgencia a corto plazo, de la que depende la supervivencia de la mayoría de las empresas».
Por todo ello, la patronal aplaude la decisión de eliminar un impuesto injusto que, además, ofrecerá seguridad jurídica y mayor certidumbre a las empresas y a los inversores, para acelerar y no poner límites a la actividad económica del tejido productivo.
En la misma línea, Empresa Familiar de Castilla y León valora positivamente que el pleno de las Cortes del 28 de abril apruebe la supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, según anunció ayer el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco. Considera que con esta medida se hace justicia y se elimina un factor factor que contribuye a la fuga de empresas de la Comunidad.
El director de Empresa Familiar, Eduardo Estévez, afirma que la eliminación de este impuesto es una demanda que desde hace tiempo se venía planteando desde la asociación, dado que se trata de una tasa «muy injusta» que está teniendo consecuencias negativas para la economía de Castilla y León.
En este sentido, Estévez reitera que este impuesto es una de las razones de la fuga de empresa de la Comunidad, ya que en comunidades vecinas ya no existe. «Estamos muy satisfechos y, aunque llega tarde, consideramos que se trata de una decisión muy acertada», subraya, a la vez que planteó que la medida tenga efectos retroactivos, dado que en principio estaba previsto que se hubiera aplicado antes de la pandemia.
A su vez, también asegura que se trata de un impuesto que a penas tiene peso en las cargas de Castilla y León, ya que sólo representa el 0,35 por ciento de los ingresos de la Junta vía impuestos, e insistió que para Empresa Familiar es muy importante que los propietarios en vida puedan organizar a través de la donaciones la continuidad de las sociedades. Por último, Estévez reclama a la Junta la supresión del Impuesto sobre el Patrimonio, una tasa que solo existe en España.